Subasta
En un mercado que sigue sin presentar síntomas de fatiga, varias casas de subasta se han apuntado en los meses pasados a probar con nuevos eventos.
Durante abril y mayo ha habido varios experimentos por parte de numerosas casas de subastas que se han aventurado a probar nuevas plazas, con muy diferentes resultados. Curiosamente se ha dado la situación sin precedentes de que dos de ellas han tenido lugar en España, concretamente en Barcelona, aunque ambas han sido llevadas a cabo por empresas extranjeras.
Comenzamos precisamente por una de ellas, la que celebró la casa holandesa de subastas por internet Catawiki entre los días 29 de marzo y 14 de abril. Se trataba de una venta encuadrada en el Salón Retromotor de Barcelona, cuya fecha de inicio coincidió con la apertura de la renovada feria catalana, y dentro del propio salón se podían ver tres de los 20 lotes ofrecidos. Uno era un estupendo Alfa Romeo Montreal de 1972 con matrícula española antigua, que a la postre terminó convirtiéndose en el lote más caro al adjudicarse por 69.000 € -comisión aparte- a un comprador español. Otro de los vehículos expuestos en Retromotor, un Mini Moke de 1988, con sólo 14.000 km, también se vendió, en este caso por 16.000 €. Como curiosidad, el Mercedes
Benz E 320 Familiar de 1995 que había sido coche personal de Montserrat Caballé se remató por la modesta cantidad de 5.000 €, mientras que el coche más caro que quedó sin vender fue un Maserati Quattroporte de 1963 en estado medio, cuyas pujas alcanzaron los 48.000 €.
Hacia mediados de abril todo el mundo del coche clásico puso sus ojos en la Feria Techno Classica de Essen. Tradicionalmente la casa británica Coys jugaba en solitario en esta plaza, pero este año le ha surgido la peligrosa competencia de la angloamericana RM-Sotheby´s, que desembarcaba por primera vez en Essen con un impresionante plantel 229 vehículos. Esta subasta se dividió entre los días 11 y 12 de abril, y finalmente se adjudicó un 86% del total de los lotes ofrecidos, lo que significó una facturación final de 18,7 millones de euros. El coche más caro de RM-Sotheby´s fue un Mercedes Benz 540 K Cabriolet A de 1937, vendido en 2,2 millones de euros, incluidas comisiones.
Los lotes que despertaron mayor interés entre el público fueron un grupo de Lancia y algunos de los vehículos de la «Youngtimer Collection» que RM-Sotheby´s está desgranando a lo largo de todo el año en diferentes subastas. En cuanto a los Lancia que cosecharon precios de récord estaban un