Motor Clásico

Seat en 1969

Todos los modelos de aquel año

- BLAS SOLO (TEXTO). MIKAEL HELSING/MPIB (FOTOS)

En julio de 1969, Seat alcanzó el millón de unidades producidas. Fue también el año en que se presentaro­n modelos tan significat­ivos como el 1430. Seat dominaba el mercado español por número de unidades vendidas y también por amplitud de gama, que ya abarcaba desde los coches para la mayoría, el 600 y el 850, hasta berlinas de lujo y deportivos.

Amediados de la década de los 60, la diferencia en desarrollo social y económico entre España y otros países de Europa Occidental se fue reduciendo rápidament­e, pero seguía siendo grande. Se notaba en todos los aspec tos que a fec taba n a l automóv i l, desde el nú mero de coches por habita nte hasta la red v ia l. Además, el llamado desarrolli­smo de los 60 en España no cambió algunas prácticas de la etapa anterior de autarquía. La importació­n de coches estaba prácticame­nte bloqueada mediante impuestos que, en ciertos casos, podían llegar al 60 por ciento (entre el arancel a la importació­n, el impuesto de compensaci­ón y el de lujo). Entraban los Mercedes-Benz de toreros y oligarcas, pero traer utilitario­s o modelos para la incipiente clase media era prácticame­nte imposible.

En consecuenc­ia, la demanda de automóvile­s se surtía de las fábricas radicadas en España y «la Seat» (hasta la propia marca lo escribía con el artículo) se destacaba por número de unidades y variedad de modelos. Casi el 60 por ciento de los coches vendidos en España en 1969 eran Seat y esa penetració­n había estado subiendo durante esa década. Aquel año fue importante para la marca y para la industria en España porque, en julio, alcanzó el millón de unidades, desde el comienzo de la producción en 1953 (con el 1400). También fue un año en el que Seat presentó varios modelos: el 1430, el 124 5 Puertas (familiar) o el 850 Sport (el descapotab­le). Fue también el último año de producción del 600 D (reemplazad­o por el E).

Desde 1967, un nuevo acuerdo con Fiat implicó una mayor participac­ión en Seat, una disminució­n de los cánones y la posibilida­d de exportar coches y recambios a través de la red internacio­nal de Fiat, algo que favoreció la actividad industrial de Seat. En 1969, las exportacio­nes de Seat eran todavía escasas (unos 3.600 coches), pero se

EL 14 DE JULIO 1969, SEAT ALCANZÓ UN MILLÓN DE UNIDADES DESDE QUE COMENZÓ LA PRODUCCIÓN, EN 1953. LA MITAD DE ELLAS FUERON 600

EN 1969, MÁS DE LA MITAD DE LOS COCHES VENDIDOS EN ESPAÑA ERA MARCA SEAT

estaba preparando el terreno para entrar en otros mercados y, en 1970, esa cifra se multiplicó por diez.

Algo imposible de expresar en números es la percepción que había en España de Seat. Independie­ntemente de que la población estuviera al tanto de que Seat era una empresa con mayoría de capital estatal, se percibía como la marca patria, aun cuando había otras que fabricaban en España. Seat contaba con la ventaja de una red comercial superior a sus competidor­es. Para muchas personas era la primera marca en la que pensaban cuando tenían que comprar un coche (o aspiraban a hacerlo). Además, un 600 D seguía siendo la opción más barata del mercado (más incluso que un Citroën 2 CV) y un 850 costaba menos que un Mini 1000, un Renault 4 o un Simca 1000. Un 124 L costaba algo más que un Renault 10 (inferior en varios aspectos al Seat) y menos que un MG 1300 o un Simca 1200. Por una u otras razones, en 1969, España era de Seat. mc

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 ??  ?? Casi todas buenas. Seat tenía una gran fidelidad de marca entonces, en parte porque no había mucho donde elegir. La mayoría de ese millón de experienci­as fueron positivas.
Casi todas buenas. Seat tenía una gran fidelidad de marca entonces, en parte porque no había mucho donde elegir. La mayoría de ese millón de experienci­as fueron positivas.
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