Manivela de arranque
Los toros se ven muy bien desde la barrera. He asistido a numerosos (muchos)rally es, concentraciones ,« tours », durante mis veintiocho años de profesión en esta revista. En la mayoría asistía como observador y en alguno he participado. A mediados de los noventa, por ejemplo, se multiplicaron los «rallyes» de coches antiguos. Eran paseos de fin de semana, a su ritmo y con frecuentes paradas para dar ambiente a un pueblo perdido y, sobre todo, agradecer al alcalde o concejal de turno por el aperitivo con que solían agasajar a los «de los coches viejos». Cariñosamente los denominábamos «ay untarallyes». Fue la manera de promocionar la afición en lugares poco frecuentados por el turismo.
Luego llegó una generación de veteranos deportistas dispuestos a ganar, en su segunda juventud, un «campeonato» que les iba más acorde a su edad. Los rallyes de regularidad y velocidad cobraron brío con citas como el Tour de España y no pocos campeonatos, copas y trofeos regionales.
Como decía, he tenido el privilegio de poner en el asiento derecho o izquierdo en citas como el mencionado Tour, el Gran Premio Nuvolari, el Rallye de España y otros menores. Recuerdo que mis primeras Mille Miglia italianas, allá por 2002 —fui como mirón—, me deslumbraron. ¡Qué ambiente! ¡Qué organización! «Che macchine!» (así lo titulé). Gentío en cada esquina, en cada cuneta, críos y mayores, señores y señoras.
Pues bien, ahora hemos decidido saltar al otro lado de barrera y tirarnos al ruedo. Coger al toro por los cuernos y organizar el I Motor Clásico Rally. Las rutas que venimos realizando con los coches de Seat Coches Históricos en los últimos años han terminado de prender la llama. A través de estos viajes hemos recorrido rutas, localizado rincones y encontrado gentes, tradiciones y una cultura local extraordinarios.
No vamos a descubrir nada nuevo. Pero nos hace ilusión compartir con vosotros estas experiencias. Arrancaremos despacio, como nuestras veteranas máquinas, dejando que los motores vayan cogiendo su temperatura óptima de rodaje. Este primer rally será una ruta de un día, en octubre, para dar la bienvenida al otoño y despedir los rigores del verano. Sin ostentación, sin clasificaciones de por medio ni uso de cronómetros sofisticados, pero organizada con cariño.
Tendrá el ánimo de juntarnos, conducir por carreteras secundarias, viajar sin prisas, disfrutar del coche, de los paisajes y de la riqueza que, seguro, vamos a encontrar por el camino. Claro que no faltará la vertiente gustativa y gastronómica. España es rica en tales menesteres allá por donde vayas.
Alguien dijo que «si el viaje no cambia al viajero, entonces es solo turismo». Nosotros queremos viajar. mc
«Motor Clásico Rally será una experiencia, sobre todo, para disfrutar de los coche y del arte de viajar»