Carroceria e interior
El sistema eléctrico es muy complejo y, según el equipamiento, puede tener hasta nueve centralitas. Entre los problemas eléctricos están los potenciómetros que accionan cada una de las dos mariposas: tienden a fallar, se nota en un aceleración irregular y cambiar los dos puede costar 2.000 €.
El control electrónico de la amortiguación EDC es otra fuente de problemas, hasta el punto de que sale más barato reemplazarlo por uno convencional (unos 1.000 €) que repararlo.
Hay que asegurarse de que la calefacción y el aire acondicionado funcionan perfectamente. También todas las velocidades del ventilador porque cambiar las resistencias en el interior del salpicadero son dos días de trabajo. Aunque en menor medida, pasa lo mismo si hay que cambiar los condensadores o las bombillas de la instrumentación (hasta hay que quitar el airbag para hacerlo).
El circuito impreso del check control envejece mal. Uno de los síntomas es que las luces de indicador de inter valos de ser v icio no funcionan. Si es así, hay que encontrar a un especialista que lo repare porque no hay repuestos. El ordenador de viaje también está entre las quejas frecuentes de los propietarios.
La ca lidad de los materia les de recubrimiento, incluida la tapicería, y el ajuste interior son buenos. Si, pese a todo, hay demasiado desgaste, por ejemplo en el lado derecho del asiento del conductor, un tapizado costará más que en otros coches.