Carrocería e interior
Hay muy pocos coches en el mercado, la información sobre fallos recurrentes en la carrocería es muy escasa y, por tanto, poco fiable. Así que lo mejor es tener en cuenta los consejos generales para los coches con paneles de plástico reforzado con fibra de vidrio: buscar grietas en las zonas de fijación al chasis y comprobar si hay abultamientos o decoloración. En el caso del Spider, si existen paneles dañados, es un problema porque repararlos resulta difícil y encontrar recambios aún más. Aunque un inconveniente de las carrocerías de fibra es que pueden esconder corrosión en el bastidor, en el Spider es raro que ocurra. El aluminio se oxida más rápidamente que el acero pero la capa de óxido actúa como un tratamiento protector. Algunos usuarios han citado como problemas de la carrocería las salidas de agua para el parabrisas, que resultó ser la bomba. El soporte del bote del propio líquido lavaparabrisas parece ser que se corroe, aunque supongo que depende del pulso que tuviera quien rellenaba el líquido y cuánto cayera fuera del depósito. Hay también algún usuario al que le ha dejado de funcionar la instrumentación. También hay quien se queja de que el tirador para abrir el capó se destensa con facilidad.
De serie la única opción disponible era el airbag del conductor, solo para la versión con parabrisas. Como opciones de concesionario, es decir, no de montaje en fábrica, había varias: una cubierta de lluvia (solo para el de parabrisas), radio, alfombrillas, soporte para equipaje, una cubierta protectora y ruedas especiales.