Champions sin Messi
El Barça, tras orecer en la Liga un magnifico espectáculo, visita Mönchengladbach en Champions, en su primer partido fuera del Camp Nou. La diferencia entre los dos equipos es notable. El equipo de Luis Enrique en el aspecto técnico es muy superior, mientras la baza alemana es imponer la intensidad y ritmo en el partido. El suizo Sommer en la portería ofrece seguridad pese a no tener una gran envergadura. La zaga, con tres centrales, intentará cerrar los espacios por el centro y recibir los jugadores de segunda línea. El Borussia juega con dos carrileros que se incorporan por las bandas. Johnson es más efectivo por la derecha y Went, por la izquierda. Destaca en la media Kramer, que aporta consistencia y en el ataque en la mayoría de partidos juegan con el belga Hazard detrás de sus dos atacantes Raffael y Stindl.
Sin duda, el asturiano alineará al equipo más competitivo, siempre pensando en que la ausencia de Messi se mitigue lo mejor posible. Rafinha ocupó la posición de Leo en Gijón, marcó gol y realmente hizo un gran partido. Sus movimientos hacia el interior propiciaron las incorporaciones de Sergi Roberto por la banda derecha: sorpresa, velocidad en progresión y centros de mucha calidad es el bagaje productivo de esa banda derecha. La marcha de Dani Alves ala Juventus después de tantas temporadas de éxito nos ofrecía dudas de cómo compensarlo. Luis Enrique, ya la temporada pasada, alternó algunos partidos a Sergi Roberto con Alves y este se ha anticipado a todos, sobre todo a Aleix Vidal. Con su juego está demostrando su capacidad de mejora en el aspecto defensivo y en el que tiene que seguir aprendiendo. Sin duda, Roberto es un maestro en la salida del balón, no comete errores y actúa con una precisión que ni el mismísimo Alves lograba. La ausencia de Messi responsabiliza a los demás jugadores importantes, sobre todo a Neymar, Luis Suárez, Busquets, Iniesta y Piqué. En definitiva, a todo el equipo