Mourinho, sin defensa
‘The Humiliated One’ (‘El Humillado’). Es el titular que tanto The Guardian como Daily Telegraph dedicaron ayer a José Mourinho, duramente criticado por la prensa inglesa tras su desastroso regreso a Stamford Bridge como técnico visitante. El Chelsea barrió al Manchester United (4-0) y el portugués es considerado el gran responsable del naufragio defensivo.
Mou se autoproclamó como ‘Special One’ (El especial) cuando fue presentado en 2004 en su primera etapa como entrenador del Chelsea. Pero el domingo la afición ‘blue’ cantó ‘You’re not special anymore’ (“Ya no eres especial”) al técnico que se convirtió en su ídolo por sus tres Premier ganadas al frente del equipo londinense.
Por cierto que Antonio Conte, entrenador del Chelsea, negó haber humillado a Mourinho, como éste le reprochó al final del partido, por celebrar efusivamente el cuarto gol. “Si quieres reprimir las emociones, mejor me quedo en casa y cambio de trabajo.No me burlé de nadie. Siempre muestro gran respeto por todos”, aseguró el italiano.
Giggs y los Neville, muy duros
Pero no todas las críticas son para Mourinho. Voces con peso como Ryan Giggs censuran la actitud de los jugadores tras el partido. “Cuando te acaban de ganar no puedes quedarte sin más en el campo, intercambiándote la camiseta y riéndote con el equipo que te ha goleado”, asegura el exextremo galés, leyenda viva del Manchester United.
Otro exdiablo rojo, Gary Neville calificó de “maniquís con esas camiseta rojas” a los jugadores del United y definió el desastre “como basura defensiva”. En esta línea,. su hermano Phil Neville calificó de “absolutamente escándalo” que Paul Pogba y Ander Herrera permitieran que N’Golo Kanté se internara a sus anchas y marcara el 4-0 a placer.
Mourinho debe encontrar soluciones urgentemente ya que mañana recibe al Manchester City de Pep Guardiola en octavos de final de la Copa de la Liga. Otro derbi con más morbo si cabe que el ganado en la Premier por los ‘citizens’ el 10 de septiembre también en Old Trafford (1-2). Pep también viene de ser humillado por 4--0 por su exequipo, el Barça. Él o Mou quedará apeado, se hundirá en su crisis y dirá adiós al primer titulo de la temporada.
Si ya su defensa fue un coladero el domingo, Mourinho afrontará las próximas semanas sin su principal baluarte y titular fijo, el central Éric Bailly, quien sufrió una lesión de rodilla que le mantendría más de un mes de baja