Leo puede con el humo

A LOS CORREVEIDILES DE FLORENTINO no les interesa un Cristiano a la deriva y tampoco el calamitoso Real Madrid les da para disfrutar del liderato, por lo que cogen aire recolectando las mil y una ‘provocaciones’ del Barça en Mestalla en los últimos años. La afición del Bernabéu tiene un filón al que cogerse con los goles de Morata y el desequilibrio de Lucas

Vázquez, pero la consigna es ensuciar la imagen de Neymar ,de Luis Suárez yla de Messi y minimizar el lanzamiento de botellas con un disculpatorio ”solo fue uno entre miles” o un reconfortante “ya tienen su cara, ahora le están localizando”. El humo de los programas de la crispación no tapan lo que es obvio:

Messi ha llegado a un punto de genial madurez que se permite levantar el partido de Valencia sobre la bocina soportando con entereza la presión del parapenaltis Alves mientras el atormentado CR7 hace cosas raras como levantar la mano tras un gol de Morata.

CR7 HA VISTO QUE ESTÁ LEJOS del área y ante el Athletic jugó de delantero centro para estar cerca del gol. Pero tampoco le funcionó el nuevo rol porque su egoísmo le pudo al negar el balón a Morata ya

Kroos que llegaban con más ventaja en carrera. Iraizoz le dio una lección de humildad. Los goles de CR7 volverán, no cabe la menor duda, pero las gradas de Chamartín ya le han dicho a Zidane que la

BBC es tocable. Messi ha marcado 14 goles y Cristiano 4, con lesiones de ambos entre medio, una enorme ventaja, pero lo que realmente es definitivo es que el crack argentino lleva dos goles más que la BBC, unos números que dejan retratados a sus componentes.

MESSI PROTAGONIZA UNA temporada fabulosa aumentando su caudal de goles sin dejar de jugar en posiciones creativas. Su ego está más que saciado y se divierte con el equipo. En su noche luminosa ante el City, provocó el penalti tras un ‘hat trick’ y le dio el balón a Neymar para que lo lanzara. Un gesto solo al alcance del número uno mundial