VUELVE PACQUIAO
El filipino busca este sábado en Las Vegas agrandar su leyenda con su tercer título Welter de la OMB Se enfrenta al vigente campeón, Jessie Vargas, diez años más joven, en la que sería su última pelea
“It’s fight week (Es semana de pelea) #PacVargas”. No hacía falta que Manny Pacquiao (37 años) enviara este mensaje a sus seguidores. En Las Vegas ya se vive desde hace días la fiebre y la locura por el regreso al cuadrilátero del popular boxeador y senador filipino, un personaje que despierta pasiones y que asegura siempre para su promotora Top Rank beneficios millonarios. Pacquiao ya ha llegado a la ciudad de Nevada, donde un séquito de fans y de medios de comunicación le recibió en el hall del Hotel Wynn como el ídolo de masas que es. Ha reservado 30 habitaciones para los suyos, se ha fotografiado en su gimnasio con el actor Sylvester Stallone, que interpretó a ‘Rocky Balboa’, y ha dejado entrever que, esta vez sí, podría ser la última pelea de su carrera, un adiós por todo lo alto para engrandecer su leyenda.
Todo está siendo muy acorde al show mediático que se espera del ansiado regreso de Manny. El filipino vuelve siete meses después de haber anunciado su retirada tras su pelea del 9 de abril ante Timothy Bradley, una victoria que sirvió para cerrar su récord con 58 victorias, seis derrotas y dos empates. Antes, había paralizado al mundo con su megacombate ante Floyd Mayweather, del que salió lesionado en un hombro que lo mantuvo parado durante casi un año y con quien se sigue especulando con una posible revancha. De hecho, nunca ha cerrado del todo las puertas, aunque todo apunta a que si no se ata una pelea en firme con el americano, Pacquiao ya se retiraría de forma definitiva en la madrugada de este sábado tras su combate ante el joven mexicano-estadounidense Jessie Vargas (27 años), en el fastuoso Thomas & Mack Center de Las Vegas, donde se espera un lleno absoluto.
El filipino busca por tercera vez hacerse con el campeonato Welter de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) y de entrada es favorito en las casas de apuestas. A Vargas le avala la edad, diez años más joven, y el hecho de ser el defensor del título. Presenta un palmarés de 27 victorias y una derrota. Venció a su compatriota estadounidense Sadam Ali, en marzo, para hacerse con el cinturón de la WBO y cuenta con diez triunfos por KO, mientras que su única derrota se produjo a los puntos, ante Timothey Bradley, en junio de 2015. Precisamente, Pacquiao superó a Bradley siete meses atrás, cuando anunció una retirada de la que luego se ha desdicho.
Pacquiao avisa: “No me siento viejo, me siento como si siguiera teniendo 27 años”. Su entrenador, Freddie Roach, avala a su pupilo: “Es la mejor versión de Manny. No ha perdido un solo paso”. No obstante, el filipino se muestra prudente: “No subestimaré a Jessie Vargas. Es un duro campeón. Y cada rival merece mi mayor atención y respeto, por eso he trabajado muy duro. Es el combate más importante porque determinará mi futuro en el boxeo”, declaró.
Vargas, por su parte, busca consagrarse como una superestrella de este deporte. “Una victoria significaría para mí subir a la cima, me haría una estrella del boxeo. He esperado por esto mucho tiempo y voy a aprovecharlo. Los únicos que vencieron a Pacquiao se convirtieron en leyendas”