Del primer triunfo a un gran triunfo
El Divina Joventut necesitaba pasar página de su mala dinámica en el arranque liguero y la victoria de la pasada semana en Manresa ayudó a activar ese mecanismo mental. Sólo faltaba el acierto con la llegada de un refuerzo en el juego interior para que el equipo despegara. El resultado fue el triunfo sobre el Unicaja (82-79), primero en el Olímpic de la temporada, que puede servir para reanimar a los verdinegros en su, teórica, trayectoria de sufrimiento de este año.
Con el nuevo pívot jamaicano Jerome Jordan aportando desde el primer partido, los badaloneses se deshicieron del Unicaja en un encuentro que confirmó el buen momento de forma y confianza de Albert Sàbat (19 de valoración y 4 de 7 triples) y dejó constancia de la mejora del equipo en el tiro exterior (11 de 22 triples). La victoria, sin embargo, llegó con sufrimiento y tras manejar con acierto los últimos instantes gracias a un triple salvador de Bogdanovic a 1:14 del final y con la seguridad de Vidal en tiros libres. Bogdanovic, con 15 puntos y 4 de 5 triples, fue el principal puntal en ataque mientras Vidal, Lapornik y, sobre todo, Ventura lo fueron en casi todos los órdenes.
No hubiera sido necesario el drama si los verdinegros hubieran mantenido su constancia y fe durante todo el partido. Con ello llegaron a dominar por 16 puntos mediado el tercer cuarto (61-45) pe- ro una serie de errores infantiles al cerrar rebote, salir de presión o controlar a Musli propiciaron un parcial de 2-19 hasta el final del tercer cuarto que les dio a los malagueños el dominio (63-64).
Tocaba empezar de nuevo y asegurar en los instantes finales, y la Penya lo hizo a pesar de la acumulación de faltas en Jordan, que estaba aportando seguridad dentro de la zona tanto en defensa como en ataque, y dosificando esfuerzos de sus mejores hombres.
El otro pívot nuevo de este año, Garrett Stutz, volvió a mostrar inseguridad pero Miralles dio un paso adelante en este período y el equipo volvió a tomar la delantera en los minutos finales gracias a su garra defensiva y a un mejor juego de conjunto que el rival. Todo ello ayudó para poner el broche de oro a una fiesta completa en el día el socio en el Olímpic.
También colaboró el hecho de que Unicaja, que venía de perder en Murcia en Eurocup, no parece pasar por su mejor momento y no encontró apoyo ofensivo en el perímetro para compensar el daño que hacían dentro Musli y Suárez.
Con esta victoria la Penya se coloca 2-5 y encuentra algo de alivio en vísperas de la visita a la pista del ‘Estu’. El equipo tiene asignaturas pendientes pero, ahora mismo, menos urgencias que hace diez días