Selecciones y estilos
Los partidos de selecciones nacionales tendrían interés si cada país, o alguno de ellos, tuviera estilo de juego distintos. Ver a Hungría del 54 o a Brasil, incluso Inglaterra, Italia o Alemania, suponía de disfrutar de estilos distintos. Se acabó. Como se vio en la Eurocopa de selecciones, todos han caído a lo más bajo, que es el juego defensivo a la italiana, el aburrido ‘catenaccio’ que es el nivel o del fútbol, su versión más fácil.
España, gracias al Barça, ha impuesto un estilo de juego en equipo, de toque y pasa, bastante bonito de ver. Y gracias al Madrid, incluso sabe ganar en el minuto 94. Alemania sabe ganar siempre o Italia incordiar: no juega a nada y, de pronto, cuando faltan 10 minutos, se salen con unas jugadas de enorme mérito. Son buenísimos, pero solo juegan los 10 últimos minutos.
Quedan las eternas favoritas Brasil y Argentina. Brasil lo perdió todo, incluso su estilo de “juego bonito” con el siniestro Dunga, que consiguió ahogar el talento de sus cracks. A Coutinho , ni lo ponía. Ha cambiado a mejor. Argentina tiene un equipo incomprensible, dada la calidad de sus individualidades. Si siniestro ahí es Higuaín, que falló un gol hecho delante de Alemania y perdió el Mundial. Por fortuna tiene a
Messi que dio una soberana lección de pundonor, levantando al partido ante Colombia él solito. Cuanta falta le hace un Riquelme o un Verón que alimente a los delanteros y ayuda a Messi. De Francia debo decir que
Deschamps es tan negado como Dunga. Está desperdiciando a Pogba y no saca partido de lo mucho bueno que tiene