Ensayo nulo en el clásico entre ingleses y alemanes
Inglaterra y Alemania empataron en un amistoso sin intensidad y nada a rescatar
El clásico entre Inglaterra y Alemania dejó pocas conclusiones en el primer ensayo de ambas selecciones de cara al Mundial de Rusia 2018. Ambos combinados se presentaban en el mítico Wembley con numerosas bajas, lo que aprovecharon el seleccionador inglés, Gareth Southgate, y el alemán, Joachim Löw, para probar a nuevos jugadores en sus equipos, que empataron sin goles. Poco más a destacar.
De inicio fue llamativa la revolución el once de los ‘pross’, con muchísimas novedades como la del joven Ruben Loftus-Cheek, jugador del Chelsea cedido al Crystal Palace, que debutaba en la absoluta. Por parte alemana se estrenaba el defensa del RB Leipzig Marcel Halstenberg.
Destacaron en la primera mitad Leroy Sané, del Manchester City, y el delantero del RB Leipzig Timo Werner, de 21 años. En el 20’, Sané envió el balón al travesaño de un tremendo zurdazo. Tres minutos después fue Werner quien pudo adelantar a Alemania con un tiro cruzado desde dentro del área que desvió ágilmente Pickford, primero, y Phil Jones después, tras caer el balón en Sané que remató de primeras. En el 39’, otra vez Pickford adivinó el remate de Werner, de nuevo seco, raso y cruzado. Un mano a mano de Vardy con Ter Stegen que resolvió mal por alto el delantero del Leicester fue lo más destacado de los ingleses. El mismo duelo se dio nada más iniciarse la segunda parte y aunque esta vez el delantero inglés, de cabeza, la colocó con potencia abajo, el meta del Barça se lució y sacó una mano excepcional. Fue un espejismo. Ambas selecciones se limitaron desde entonces a dibujar un esquema, sin creatividad ni intensidad, y a consumir los minutos entre cambios y juego estéril. Sólo Lingard, en un remate en el 94’, pudo variar el marcador en un Wembley que de nuevo vio volar numerosos aviones de papel
El duelo en Wembley sirvió a Southgate y Löw únicamente para probar jugadores