¿A quién le importa hoy el Chelsea?
Antes de jugar octavos de Champions, el Barça tiene 2 partidos de Copa y 9 de Liga con 5 salidas: Villarreal, Madrid, Real Sociedad, Betis y Espanyol
Completada la última jornada de la Liguilla, era de cajón detenerse un instante en los posibles rivales del Barça cuando, en febrero, se disputen los octavos de final de la Champions League. A saber: Bayern. Chelsea, Basilea, Shakhtar Donetsk y Porto. Y una precisión inquietante, como el sorteo no es puro, lo más probable (43%) es que en febrero veamos una eliminatoria Barça-Chelsea. El lunes saldremos de dudas.
Ya en martes, como es lógico, hablaremos de si es el Chelsea o cualquier otro pero, sinceramente, eso de la Champions es un problema para mediados de febrero y el Barça tiene antes tantas dificultades en su camino que no le convendría desgastarse especulando sobre el potencial del rival europeo de turno. Y es que, para entendernos, antes del parón de Navidad -el que marcará la reflexión- el líder deberá jugar en Villarreal, recibirá en casa al Deportivo y acabará el ciclo en el Bernabéu: 9 puntos que convendría convertir en puntazos.
Pero es que luego, en enero, además de la eliminatoria de Copa ante el Celta, hay otros cuatro partidos de Liga. Levante y Alavés en casa, y otras dos salidas complicadas: Real Sociedad y Betis. Ya en febrero, pero aún antes del primer partido de octavos de la Champions, más madera. El Espanyol en Cornellà-El Prat y el Getafe en el el Camp Nou.
En resumidas cuentas, desde el lunes 11 de diciembre de 2017 (fecha del sorteo de octavos en Nyon) hasta el 13 de febrero de 2018 (primer partido de la eliminatoria) el Barça tiene 2 partidos de Copa, decisivos para la competición, y 9 de Liga con 5 salidas complicadas o muy complicadas. Recordemos: Villarreal, Real Madrid, Real Sociedad, Betis y Espanyol. Un calendario, sinceramente, como para no pensar en otra cosa que no sea el partido siguiente. Y el siguiente no se jugará ni en Stamford Bridge, ni el Allianz Arena de Munich, ni el estadio Do Drago de Porto. Será en el Estadio de la Cerámica y será cuesta arriba.
Y más aún, en dos meses puede cambiar todo de arriba abajo. Resultados, juego, sensaciones, plantillas ...¿ Estará todavía aquí Mas che rano ?¿ Dembéléhabrá podido justificar su fichaje? ¿Habrá venido Coutinho, que por haberlo hecho con el Liverpool no podría jugar Champions con el Barça, o quizás será Özil quien venga, que sí podría, o Arthur, que también podría? Nada. Pensar más allá de pasado mañana es empezar perdiendo en el antiguo Madrigal