El mejor equipo, el mejor jugador
Como dice Valverde, los partidos duran 90 minutos y hay que jugarlos todos. En los primeros 45, el Barça toma medidas al rival. En los segundos, Leo Messi les hace un traje a medida
No era la primera vez que insistía en la obviedad pero Ernesto Valverde volvió a recalcar en Sevilla que los partidos duran 90 minutos y que, de principio a fin, hay que jugarlos con intensidad, concentración y la paciencia suficiente para esperar que llegue el momento. Y cuando llega, aprovecharlo como lo aprovecha. Joaquín, el capitán del Betis, resumía el 0-5 reflejando que “el Barça te va fundiendo (0-0) al descanso... y de Messi ya no sabemos ni qué decir”. Dicho de otra manera, acababa de ver al mejor equipo y al mejor jugador.
Efectivamente. Otra segunda mitad demoledora del Barcelona que, semana tras semana, trabaja en el primer tiempo para tomar medidas a los rivales y en la continuación
Messi se encarga de hacerles un traje a medida. En el origen de la jugada, en el último pase, en la definición, en cualquier parte del proceso. Tanto es así, que el público del Villamarín aplaudió en pie a Leo pero no lko hizo por ninguno de sus dos goles, ni tampoco por sus asistencias. Los aficionados ver di blancos se descubrieronante el mejor del mundo cuando, a cinco minutos del final, Messi bajó a la defensa para sacar jugado el balón después de deshacerse de tres adversario, con túnel incluido a Guardado.
Y es que da igual quien esté enfrente de él y enfrente del Barça. Quien esté delante del mejor jugador y del mejor equipo. Sea el Madrid, sea el Atlético, sea el Valencia, sea el Athletic, sea la Real Sociedad, sea el Betis... la superioridad blaugrana en el tramo final es aplastante. Y es cierto, sí, que no ha ganado todos esos partidos- empató en el Wanda y en Mestalla- pero en todos ellos su dominio ha sido incontestable. La prueba es que en ese tramo ha marcado diez veces más goles de los que ha encajado. (40-4)
Para hacernos una idea de lo que esta hegemonía representa en números, reflejar que el Barcelona ha hecho 40 goles en 20 segundas partes y sólo ha encajado 4. Y esos 40 goles (sobre un total de 57), son sólo uno menos de los que ha metido el Valencia - segundo máximo goleador del campeonato- en sus 20 partidos completos. Y el Real Madrid, en total y contando los 7 que de tacada le endosó el domingo al Celta, ha metido uno menos, 39. Y el Celta, 35, la Real Sociedad, 34, el Betis, 33, el Atlético sólo 29 (los mismos que el Girona). Vamos, que el Barça no es el del fútbol brillante de los tiempos más gloriosos, pero, por demoledor, sigue siendo esplendoroso. Y con el mejor
Messi de siempre