Wozniacki, campeona y vuelta al nº 1 mundial
La danesa logra el perseguido gran triunfo a los 27
A sus 27 años Caroline Wozniacki vive un sueño que no alcanzó cuando emergió en el circuito como una potencial campeona. Se le escaparon las finales del Open USA 2009 y 2014, tuvo que aguantar las críticas de ser una número uno mundial sin trofeo de peso. Ahora puede gritar bien alto que es una grande con mayúsculas. Venció a la rumana Simona Halep (26 años) 7-6 (7-2), 3-6 y 6-4 en 2h.50’ de una final de nivel, suspense y agonía.
Wozniacki hace historia para Dinamarca y personal. Ya tiene su Grand Slam, y vuelve al número uno mundial seis años después. Sucede en el palmarés a su gran amiga Serena Williams, que la rescató en los tiempos de críticas deportivas y sinsabores amorosos, cuando el golfista norirlandés Rory McIlroy rompió el compromiso de boda con las tarjetas de invitación cursadas.
Un talón por dos millones de euros y la gloria negada de nuevo a Halep, que cede su nº 1 y que mantiene la asignatura pendiente del Grand Slam. Tercera ocasión sin premio, tras las de Roland Garros 2014 y 2017.
Maestra’ WTA en las Finals de Singapur para rematar 2017, no podía empezar mejor 2018 para Wozniacki, entrenada por su padre Piotr, antiguo futbolista profesional, y prometida con el ex NBA David Lee. Su vigésimo octava corona, la más preciada.
En segunda tuvo pie y medio fuera, remontó dos bolas de ‘match’ ante la croata Jana Fett que sirvió para partido con 5-1 y 40-15. En la espectacular cita con Halep la danesa empezó fulminando, aunque los nervios prolongaron la sentencia del set inicial en el ‘tiebreak’, tras haber servido para ello con 5-3.
A favor de Wozniacki, que ya son cinco victorias sobre siete enfrentamientos sobre Halep. Algo que ayuda en situaciones límite. Calor y humedad agobiantes en Melbourne, y la rumana pidiendo la asistencia médica. Le tomaron la tensión y otras constantes, y aguantó para equilibrar el duelo.
Wozniacki necesitó un vendaje en la rodilla izquierda, en el único momento en el que estuvo abajo en el marcador: 4-3 y saque Halep. Ganó tres juegos seguidos para sentenciar