El título está ya a dos victorias
El Barça necesita seis puntos para ser campeón sin depender de lo que hagan Atlético y Real Madrid
El Barça está mas cerca de conseguir el título de Liga. Necesitaba siete puntos para proclamarse campeón y tras el empate de ayer ya son sólo seis, y contando con que sus rivales lo ganasen todo hasta el final. El equipo azulgrana suma ahora 83 puntos, le saca 12 al Atlético de Madrid que, con 71, juega mañana contra la Real Sociedad en Anoeta. Los rojiblancos necesitan ganar cada partido para mantener sus opciones de conquistar el título de Liga. El Real Madrid se aleja ahora hasta los 16 -tiene 67y se mide hoy al Athletic en el Bernabéu.
La final de la Copa del Rey que jugará frente al Sevilla este sábado 21 de abril permitirá a los azulgrana ser un mero espectador en la próxima jornada y ver qué hace el Atleti el jueves y el domingo. Su encuentro ante el Villarreal se ha aplazado hasta el 9 de mayo por la final de Copa, como el del Madrid ante el Sevilla.
La combinación del doblete
Si Atleti y Madrid pierden sus partidos de Liga que le quedan esta semana (dos los rojiblancos y uno los merengues), el Barça se proclamaría campeón el próximo domingo tras el choque de los colchoneros ante el Betis. Una combinación que podría ser de doblete si el Barça gana la Copa VALVERDE AGRUPÓ A LOS SUPLENTES para que hicieran su propia revolución. Una mezcla pensando en la final de Copa que mostraba a la vez lo que hay al fondo de la nevera. Y lo que encontramos no es tan decepcionante como a veces se dice desahogadamente en los arrebatos de enfado. Así que la mitad de los titulares se quedó en casa y la otra en el banquillo de Balaídos para mostrar a un Barça inédito y extraño pero batallador y burbujeante. La revolución de los suplentes jugó a ganar desde el principio, con desacierto y pérdidas, sí, a golpe de reivindicación y superando con entrega la dificultad de no haber jugado juntos y la infelicidad de su poca participación. La mezcla de tanta rebeldía fue desigual, más bulliciosa en el área gallega por las ganas de Dembélé de sentirse protagonista, recompensadas con un golazo, por el toque suave de Coutinho y por Alcácer, que firmó una asistencia y un tanto. La sala de mandos, con André Gomes, Paulinho y Denis Suárez sufrió por sus propias imprecisiones, muy por encima de la pareja Vermaelen-Yerri Mina que apenas habían jugado juntos.
EL EMPATE ES BUENO PORQUE los suplentes, sospechosos habituales, sumaron un punto que acerca más la Liga, alargaron la racha a 40 invictos y tuvieron minutos de lucimiento. El Mosquito rompió el marcador y el gol de Alcácer, que ponía el 1-2, a pase de Semedo, coronó una sucesión de 30 combinaciones con el balón controlado durante 72 segundos (min. 63). Para entonces Messi ya estaba en el campo como revulsivo para rematar el partido. Su presencia causó un efecto atemorizador en el Celta, replegado en su área, pero el Barça no pudo superar la expulsión de Sergi Roberto, provocada por Iago Aspas cuando se iba solo ante ante Ter Stegen, que estrenó capitanía y tuvo una actuación salvadora. Aspas igualó con la mano en el arreón final. El Barça ya está metido en la final de Copa, un duelo al que llega con sus titulares descansados y Cillessen en la meta