Muere el socio que desapareció del Camp Nou

Una historia. Cuando empecé a ir al Camp Nou a mediados de los 70, mis abuelos tenían los abonos en la tribuna alta. Poco antes de empezar cualquier partido, nos debíamos levantar para dejar pasar al abonado de al lado. En la nomenclatura de entonces era la fila 8 de la boca F rojo. El barbudo abonado llegaba con su macuto de treintañero, cantaba el himno, animaba y se iba para casa. Alguien nos dijo que era el periodista que más sabía sobre el mundo de la ‘Nova cançó catalana’. No había Google, pero descubrimos que sí, efectivamente, Jordi GarciaSoler era el que más dominaba del tema musical. Pronto leímos que fichó por el

PSC y montó el gabinete de comunicación. Pero en el segundo año de Maradona en el Barça, desapareció del Camp Nou y jamás volvió a su butaca. Muchas décadas más tarde, ya como miembro del Consejo de la Corporació Catalana de Ràdio i Televisió, nos reencontramos. Él estaba igual y yo ya no era un niño. Le pregunté por qué nunca más había vuelto al estadio. Respondió: “El día que Goicoechea lesionó a Maradona en el estadio, llegué a casa tan encendido, tan cabreado, dispuesto a hacer cualquier disparate, que me di miedo a mí mismo y decidí no volver al fútbol”. Y cumplió. Este domingo Jordi Garcia-Soler murió de un infarto. Descanse en paz.