Una carambola

artin Braithwaite se ha preparado a conciencia en el parón y en Mallorca tuvo su recompensa. Se postuló como ese delantero de refresco (o titular) que viene necesitando el Barça desde la salida de Pedro. Entiende la dinámica del juego, tiene gran capacidad de asociación, conecta con Messi y cuando le llega un balón al área se viste de ‘killer’. Ayer consiguió su primer gol, pero en los escasos minutos que ha disputado como culé ha demostrado que siempre que juega pasan cosas.

Es curioso que una figura tan necesaria en el campo o en el banquillo aterrizara por accidente. Si no fuera por la doble desgracia de las lesiones de Suárez y Dembélé con la ventana de fichajes cerrada, Braithwaite no habría llegado. Dos malas noticias que pueden haber terminado en una carambola. Tampoco fue un regalo, el Barça pagó 18M por un delantero de 29 años y escaso cartel. Si el danés cumplía en los pocos partidos que tenía por delante y disputaba una buena Eurocopa, podía llegar a ser un buen negocio. No habrá Euro pero quizás tampoco hará falta hacer caja porque la buena inversión será que se quede. Suárez seguramente irá a más y Griezmann, quien había disparado la expectativa asegurando que estaba mejor que nunca, volvió al gris.

No debió ser una noche fácil para el entrañable Javier Aguirre y su Leganés. Tras una derrota que le complica mucho la vida, pudo certificar viendo a Braithwaite en Mallorca que no se quedó cortó con el célebre “nos ching…”. A Aguirre el martes le toca visitar al dentista, en el Camp Nou

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