Un Barça a puerta cerrada
El portero alemán se exhibió con tres paradones, encadenando cuatro encuentros sin encajar un gol
Por primera vez en toda la temporada, el Barça encadenó cuatro partidos a cero. Frente a la Real Sociedad (1-0), en el último antes del parón por la pandemia, y ante el Mallorca, el Leganés y el Sevilla en los tres de la reanudación. Y, de nuevo, gracias a Ter Stegen. El portero alemán atajó tres ocasiones claras del Sevilla y dio vida a un equipo azulgrana más pendiente de atacar que de defender. De los 41 partidos de esta temporada, los azulgrana han logrado que 14 de ellos acaben a puerta cerrada.
El primer paradón recordó a aquella jugada en Liverpool, a aquel maldito córner que pilló a todos desprevenidos. En una falta en el lateral del área, el Sevilla supo sacarla con rapidez, dejando a Ocampos con libertad de movimientos en el interior. Su disparo con toda la intención del mundo acabó siendo desviado por un Ter Stegen que no se movió cubriendo el palo corto de la portería. Minutos después, el alemán volvió a exhibir todos sus reflejos, cuando Munir viniendo a la carrera por su derecha le lanzó un zurdazo que también repelió. La tercera, igual de clara que las otras dos, pudo ser el gol del triunfo. Reguilón, en el interior, aprovechó un mal despeje para empalmar un balón. No iba con fuerza y la buena posición del alemán hizo el resto.
Hasta esta jornada, el Barça había encadenado tres encuentros sin recibir un tanto. Fue entre la jornada 7 y la jornada 9, con Getafe (0-2), el propio Sevilla (4-0) y Eibar (0-3). En el cuarto partido, siempre con Ter Stegen en la meta, el Valladolid maquilló la goleada encajada con un gol (5-1). En aquella ocasión, además, hubo por en medio el encuentro europeo ante el Slavia en Praga en el que el alemán acabó encajando un tanto (1-2).
Hay que remontarse a finales de la temporada pasada para encontrar
La primera parte de Leo Messi fue un combate permanente. Por batir al Sevilla, sobre todo con lanzamiento de faltas, y por sortear a unos rivales empeñados en evitar sus incursiones. Se las tuvo con Reguilón, que llegó a ver incluso una amarilla por una entrada a destiempo, aunque bien hubieran podido un precedente parecido con cuatro encuentros consecutivos sin recibir un tanto, contando todas las
ser dos, y también con Diego Carlos, de una manera más ostensible. Fue en una tangana en el tramo final de la primera, cuando el jugador del Sevilla le entró por detrás. Leo se levantó, se revolvió y se encaró. El central aprovechó para caer a plomo buscando la amonestación. El choque de Messi con Reguilón ya viene de su etapa en el Real Madrid.
En el terreno deportivo, Leo se exhibió, competiciones. Fue a finales de la campaña 2018-2019. Entonces, el Barça encadenó cuatro encuentros, tres terminaron en victoria y uno en empate. Después de igualar a cuatro en Villarreal, el equipo azulgrana recibió al Atlético de Madrid en el Camp Nou y acabó ganando (2-0). Luego se fue a Manchester para jugar ante el United en la ida de los cuartos de final de la la Championes League y salió vencedor (0-1). Días
El Barça no ha recibido ningún tanto en los tres partidos de esta post-pandemia