Oasis hasta llegar a Lisboa

l final de temporada del Barça se asemeja a una travesía por el desierto, larga, difícil, por momentos extenuante y -hasta la fechasin títulos. En Vitoria los azulgrana encontraron un oasis que les permite juntar algo de fuerzas, recuperar la paz y un poco de frescura. La despedida de La Liga brinda un ápice de esperanza de cara a que el equipo consiga recomponerse y llegar al partido contra el Nápoles con garantías. La goleada en Mendizorroza también reivindica la figura de los jóvenes y

que demostraron que deben ser protagonistas en lo que queda de curso. La alegría y frescura que aportan al equipo es la mejor noticia para el Barça hasta la fecha, junto con el histórico séptimo ‘Pichichi’ de

Justamente el capitán se encargó de acabar de plantar las palmeras del oasis con un cambio radical de mensaje. Decidió volver a tomar la palabra con un objetivo claro: calmar las aguas y mandar un mensaje conciliador. Seguramente también le ha salvado el puesto a evitando experimentos que empezaban a sondearse como el de ha hecho algo imprescindible para llegar a Lisboa, buscar la cohesión del grupo en un equipo que, ya de por sí tiene muchas carencias: ni va sobrado de efectivos, ni llega en un momento óptimo físicamente, ni tiene un liderazgo claro. Veremos si con cohesión basta, pero sin ella, no hay nada. El presente exige un momento de altruismo, generosidad y entrega al club. No solo de los jugadores y técnicos, sino también de los dirigentes cuyas decisiones, últimamente, han dejado bastante que desear, siguiendo la necesaria línea crítica de

Como zanjó su discurso ayer “no hay nada más que hablar”. Feliz verano para tod@s y a cuidarse mucho!

Fati, Messi. Leo, Riqui Puig Ansu Messi. Setién, Kluivert. Messi

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