Mundo Deportivo (At. Madrid)

El invento de las Supercopas

-

Que conste que mi reflexión no está influencia­da por la derrota del Barça en la final de la Supercopa de España. Antes que nada, felicidade­s al Athletic por el título. Pero mi valoración sobre esta competició­n y su formato es la misma desde hace años: negativa. Y ahora, convertida ya en un negocio económico, todavía la veo peor. Y pienso igual de la Supercopa de Europa entre el campeón de la Champions League y de la Europa League.

Para mí ya no tenía mucho sentido antes que el campeón de Liga tuviera que enfrentars­e al campeón de Copa en busca del ‘supercampe­ón’. Sos dos competicio­nes distintas, pero el mejor siempre será el de Liga, el trofeo más importante.

Pero es que ahora, con el formato de ‘Final Four’ ya la pueden ganar equipos que no conquistar­on nada la temporada anterior. Se aprovechó de ello el Real Madrid en 2020 en Arabia Saudí y casi lo hace el Barça el domingo. Se la llevó el Athletic, que por lo menos tiene pendiente la final de Copa.

La Supercopa es un invento de hace cuatro días y como tal hay que darle una importanci­a relativa. Yo jugué hasta 1981 y en mi época ni existía. Si se repasa el palmarés se verán los tumbos que dio desde su primera edición : 1982-83. Por entonces, si un equipo hacía doblete Liga-Copa, ¡la Supercopa se le adjudicaba automática­mente! Así, de regalo, tienen una el

Athletic y el Real Madrid pese a que a mediados de los 90 ya se estableció que en esos casos el segundo de la Copa (¿y por qué no el de Liga?) accediera a la final de la Supercopa. Criterios aleatorios.

En los 80, por cierto, sin que nadie protestara, no se disputaron dos ediciones porque el Madrid, campeón de Liga, prefirió los torneos veraniegos, mucho más rentables económicam­ente, a pelear por un título sin prestigio, y que podía perder, ante la Real Sociedad y el Zaragoza, campeones de Copa. Cachondeo.

Se jugaron a ida y vuelta, luego a un partido, como en Tánger en 2019, cuando ya se impuso el negocio, antes del ‘macroinven­to’ de la ‘Final Four’ de Arabia Saudí que parece que se va a quedar, aunque este año se ha hecho en Andalucía por el Covid-19. Si lo que se busca es un Barça-Madrid, ya ha salido mal dos veces seguidas. Y mi lema es que tiene que haber de todo, pero poco y bueno. Un Clásico cada quince días perdería todos su encanto.

Sí viví la Supercopa como entrenador. Y recuerdo que con Johan Cruyff la aprovecháb­amos para poner a jugadores menos habituales: un entrenamie­nto con presión. No se trata de tirar la competició­n, pues el Barça está obligado a ganar todos los títulos. Hasta los amistosos. Pero sí era un buen momento para que Koeman alineara a algunos suplentes.

Me parece absurdo, además, que las semifinale­s y la final se desempaten con prórroga. Más cansancio y riesgo de lesiones. Deberían ir a los penaltis directamen­te. Si el Barça hubiese sido el que empata en el 93’ diría lo mismo. Que no se enfade nadie, lo digo con todo el respeto, pero para el Athletic fue una final a vida o muerte, con la agresivida­d que eso conllevó. En cambio para el Barça fue un partido más. Toca pasar página y no dramatizar. A pensar ya en la Liga, la Champions y la Copa

H

 ?? FOTO: AP ?? Messi y Capa, en La Cartuja
FOTO: AP Messi y Capa, en La Cartuja

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain