Remy Gardner decanta la corona
MOTO2 ➔ Raúl Fernández cumplió su obligación con el octavo triunfo, pero terminando décimo fue suficiente
➔ En la carrera más difícil de su vida, bandera roja incluida, y que concluyó décimo, el australiano Remy Gardner se llevó el título de campeón mundial de Moto2. última carrera del año que se llevó su grandísimo rival Raúl Fernández, un octavo triunfo que le convierte en el mejor rookie de la historia en victorias – igualó el de poles en poder de Marc Márquez–. Perdió el título por solo cuatro puntos y Gardner inclinó la balanza por menos errores en carrera, solo uno por tres del rookie. Conquistaron los mismos podios, 12, y la diferencia la hizo Raúl en las victorias, ocho por cinco. Y en 2022 seguirán como compañeros de equipo en el Tech3 KTM de MotoGP.
Wayne (campeón de 500cc en 1987) y Remy Gardner se convierten en la segunda pareja de padres e hijos
Recién nacido agarró el dedo de su padre padre Wayne y lo giró como acelerando
que ganan títulos mundiales desde los Kenny Roberts, padre e hijo, aunque ellos en la categoría reina.
Contó el legendario Wayne Gardner hace unos años en una visita a MD que cuando el mayor de sus dos hijos Remy (Sidney, 24-2-1998) acababa de nacer, “me agarró el dedo meñique y le dio un giro como a un acelerador y pensé ‘este va a ser piloto’”. Quedaban muchos años por delante de un camino que pese al apellido y los contactos no ha sido fácil, de renuncias y pérdidas desde su Australia natal donde Wayne gozaba de su vida de ex campeón hasta trasladar a la familia a Sitges en 2012 para dar a sus dos hijos la ocasión de también perseguir sus sueños en la tierra prometida.
Tras varias temporadas en el CEV, con un primer podio en Albacete 2014, debutó en el Mundial de Moto3 en 2015 con una Mahindra. Por su corpulencia Moto3 fue un calvario, dejó de comer y acabó enfermando. En 2017 llegó la opción Moto2 con otra moto complicada, la Mistral, y al año siguiente se rompió las dos piernas entrenando motocross. Pero de todo salió con determinación y su famosa frase ‘poniendo los huevos sobre el depósito’. Cerró 2020 en Portimao con su primer triunfo y este 2021 ha sido el piloto más completo. Pero milagros espontáneos no existen si no van acompañados de una estabilidad emocional fuera del circuito y eso le aportan su pareja Clara Möller, una destacada amazona, su perra Bella y las horas en su taller de Vilanova i la Geltrú restaurando coches anti- guos artesanalmente ●