El Arsenal debuta a lo grande
El cuadro de Wenger remonta con épica al Leicester y sumó los tres primeros puntos del curso
Hay pocas formas tan especiales para conmemorar el vigésimo quinto aniversario de la Premier como una remontada. La protagonizó el Arsenal, irregular y mágico, perdido y recuperado ante un Leicester que se abandonó a pocos minutos para el final de un choque que sirve como gran carta de presentación del campeonato inglés.
La adrenalina del triunfo en Wembley y el tempranero tanto de Lacazette (2’), que cabeceó sin mover las piernas del césped, no parecieron servir de entrada al Arsenal durante un primer tiempo en el que no fue capaz de mostrar una imagen sólida como equipo. Los errores en la salida del balón, concatenados uno tras otro, retrataron por momentos a los de Wenger. Un despiste de Cech, tan solo dos minutos después del tanto del cuadro londinense, permitió al Leicester empatar por mediación de Okazaki, que peinó el balón para establecer el empate (4’).
Las buenas intenciones del Arsenal se quedaron en eso. La presión, efectiva durante el tramo inicial, se fue difuminando con el paso de los minutos, cuando los de Shakespeare dieron un paso al frente. Imprecisos, Xhaka y Holding entregaron balones aparentemente sencillos, hasta que Albrighton recogió uno de éstos para regalar la ventaja a Vardy (29’). No consiguió el Arsenal recuperar la precisión, pendiente de que Özil reactivase al resto. El alemán, desaparecido durante algunas fases, originó el 2-2, obra de Welbeck (45’), que acompañó a la red una jugada algo embarullada a pocos segundos para el intermedio. El empate aflojó la corbata de Wenger , entre nervioso y desanimado ante lo que ofrecieron sus pupilos.
Vardy antes de la locura
El Arsenal trató de recuperar sus señas de identidad tras el descanso, pero entonces irrumpió Vardy para rematar un córner mal defendido por Xhaka (56’). Echó de menos Wenger a Alexis, a quien le han ofrecido renovar por 330.000 euros semanales. Ante la ausen- cia del chileno, Giroud y Ramsey protagonizaron una remontada agónica e inglesa, tan típica en la Premier como inesperada a estas alturas. El galés igualó la contien- da con un remate cruzado (82’) y, tan solo unos instantes después, el francés desató la locura con un cabezazo (84’) que certificó un triunfo que honra a la Premier, y sobre todo, la convicción del Arsenal