Debut formidable de los ‘Hispanos’
España goleó a los checos en un partido excelente que le rearma para el reto del podio
Debut inmejorable de los ‘Hispanos’ en el Europeo de balonmano. La selección española crujió ayer a la República Checa (32-15) tras una actuación coral sobresaliente en todas sus líneas que le rearma en su reto de pelear por las medallas. Retirado Jicha y lesionado Babak, el equipo checo es el más asequible del grupo D, pero España tuvo el mérito de provocar el cortocircuito del rival y soltarse para afrontar con mayor confianza sus próximos encuentros ante Hungría (mañana) y Dinamarca.
Las 24 pérdidas de balón de los centroeuropeos, por sólo tres de
los españoles, evidenciaron hasta qué punto la concentración de los hombres de Jordi Ribera fue máxima, todo lo contrario que los checos, que vivieron un auténtico naufragio provocado por el huracán español, sobre todo en la segunda parte, cuando sólo marcaron seis goles.
Rodrigo, que sustituyó a Gonzalo en la reanudación, estuvo sensacional con ocho paradas y un 57% de acierto como colofón de una zaga formidable, la versión necesaria si España quiere alcanzar las semifinales por cuarta edición consecutiva. Los ‘Hispanos’ ya firmaron una gran primera parte como presentación en el torneo. Una defensa muy bien trabajada fue la base a partir de la cual los jugadores de Ribera ampliaron rentas hasta el descanso (16-9).
Automatismos
Los centroeuropeos apenas se sostuvieron con los tremendos zurdazos de Kostarek (cinco tantos). La República Checa tardó seis minutos en inaugurar su casillero (2-1), primera señal de que los automatismos de la zaga estaban conectados. El técnico Jan Filip pidió enseguida tiempo muerto para intentar variar la dinámica, pero el control fue siempre de España.
Veteranos o debutantes rindieron a un nivel altísimo, igual que el seleccionador español, que repartió minutos y responsabilidades sin que el nivel disminuyera en ningún momento. Nada mejor que todos los jugadores se sientan partícipes del éxito en un torneo de semejante exigencia.
Ferran Solé, apuesta de Ribera en lugar de Víctor Tomàs en este Europeo, correspondió al técnico con un debut de estrella: cinco goles sin fallo y amenaza constante en el extremo, las circulaciones o incluso lanzando como lateral. Él, Valero y Entrerríos fueron los máximos realizadores del equipo.
Los ‘Hispanos’ se desataron de tal manera que incluso consiguieron un parcial de 9-0 dejando secos a los checos durante 15 minutos, del 19-12 del 38’ al 28-13 del 52’, cuando la goleada hacía tiempo que era inevitable vista la dinámica de ambas selecciones. Obviamente, España deberá refrendar sus fantásticas sensaciones contra rivales de mayor peso, pero su debut invitó al optimismo