Sergio, fuera de los playoffs de la FedEx
Por primera vez desde su creación en 2007; Snedeker gana el Wyndham
El estadounidense Brandt Snedeker, con un espectacular ‘59’ en la primera jornada, ganó el Wyndham Championship, lo que representa su primer título del año, y el noveno de su carrera. Snedeker, gran dominador del torneo, cerró su actuación en Greensboro con una tarjeta de 65, cinco bajo par, para un total de 259 (-21). A tres golpes acabaron su compatriota Webb Simpson (62 golpes, ocho bajo par el último día), y el taiwanés C.T. Pan.
El español Rafa Cabrera, en línea ascendente las últimas semanas (Ryder Cup manda), continuó con su remontada y con una tarjeta de 64 golpes (-6) ascendió hasta el undécimo lugar con 266 (-14). Ocho birdies y dos bogeys pusieron punto y final a su actuación en este torneo. No tuvo una última jornada igual de recuperación el castellonense Sergio García, que bajó hasta el 24º puesto tras firmar el par (70) y sumar 268 (-12). Tres birdies y otros tantos bogeys le hicieron perder 16 puestos en la tabla. Al margen de la victoria de Snedeker y del buen ‘rush’ final de un recuperado Rafa Cabrera, al que le debieron sentar muy bien sus vacaciones escandinavas tras el British Open, el de Borriol se quedó finalmente fuera de los playoffs de la FedEx Cup por primera vez desde su creación en 2007. Algo inesperado para Sergio al inicio de temporada. Una racha de malos resultados a mitad de año han sido un lastre para el campeón del Masters en 2017. En el Sedgefield C.C. de Greensboro, el ritmo de birdies en la última jornada estaba siendo muy alto y él se fue quedando atrás al no concretar de ninguna manera sus opciones en los greenes. Luego llegaron los errores de tee a green y empezaron a caer los bogeys, hasta el punto que una buena reacción final, con birdies en los hoyos 15 y 17, que le valía para entregar una tarjeta de par, pero insuficiente. Sergio empezó el torneo el 131º en el ranking de la FedEx, con su 24º puesto finalizó el 128º y en el primer playoff, el Northern Trust Open, entran los top 125.
A Sergio ahora sólo le queda seguir apretando los dientes, tratar de sacar la parte positiva de esta semana y quizás darle una vuelta a su calendario (jugar el último torneo clasificatorio en Dinamarca la semana que viene) pensando en la Ryder Cup de París, porque ahora mismo se antoja difícil que incluso pueda entrar en el equipo gracias a una ‘wild card’ del capitán Thomas Bjorn. En 2012, Sergio ganó el Wyndham, título que le valió el pasaporte para la histórica Ryder de Medinah. Esta vez, hay que esperar un milagro para que el castellonense esté en el Golf National de París