Partido trampa

Por fin vuelve el Barça. Aunque ha sido poco tiempo sin fútbol, apenas un par de semanas, se ha hecho largo. Y es que a mí lo que me gusta es ver jugar a mi equipo, y más en el buen momento en el que estaba antes de las vacaciones. Ahora es cuestión de no confiarse y salir al campo con las mismas ganas, en un partido, el primero del año, que habitualmente se complica más de la cuenta.

Siempre ha sido incómodo el primer partido de Liga después de las vacaciones navideñas. Basta con mirar los resultados. Muchos empates o derrotas, como la famosa de San Sebastián en 2015, el primer año de Luis Enrique.

Casi ningún entrenador en los últimos años se ha encontrado con partidos cómodos a la vuelta de las vacaciones.

Yes que cuesta coger de nuevo el ritmo. Este año, además, el rival que ha caído en suerte es de esos antipáticos. En el campo del Getafe el Barça a menudo lo pasa mal. Sin ir más lejos, la pasada temporada se lesionó Dembélé y ganamos en los minutos finales con goles de Denis y Paulinho, que habían entrado en el tramo final de partido. Tres partidos salvados in extremis.

Para evitar sustos, el Barça tendrá que salir desde el primer minuto a dominar al Getafe, que además atraviesa un buen momento de resultados. La clave es jugar con la misma mentalidad que en el campo del Tottenham. Si no es así, lo pasaremos mal.

Creo que el equipo está en condiciones de escribir este año una buena carta a los Reyes Magos en forma de títulos. Los fichajes los dejo para el verano