Histórico triunfo del Huesca en casa ante un triste Betis
Sanabria adelantó de penalti a los de Setién, que perdieron su renta en seis minutos
David Ferreiro y Christian Rivera se convirtieron ayer en los Reyes Magos de El Alcoraz. Sus goles en el tramo final de partido le dieron al colista, Huesca, una histórica victoria en casa, la primera que consigue en la máxima categoría, después de firmar una gran remontada, en sólo seis minutos, ante un decepcionante Betis que se había adelantado en el marcador gracias a un dudoso penalti que materializó Sanabria.
La afición y los jugadores oscenses celebraron el triunfo abrazados y dando botes de alegría, como si hubiesen ganado la Champions. No era para menos, el nuevo año les hace soñar con una permanencia que sigue estando muy difícil, pero no imposible. “¡Sí se puede! ¡Sí se puede!”, gritó la parroquia azulgrana, convencida de que puede llegar el milagro viendo la actitud y las ganas que pusieron los de Francisco ante un Betis en puestos europeos y del que se esperaba mucho más.
Las ideas se le congelaron por completo al equipo de Quique Setién en un partido disputado bajo un frío intenso. El Huesca, acostumbrado a esta climatología , estuvo más cómodo sobre el terreno de juego. En una primera mitad con pocas ocasiones de gol, el conjunto verdiblanco apenas inquietó al meta
Santamaría, mientras que los de Francisco tuvieron más presencia en el área y obligaron a cometer muchos errores al equipo andaluz, que regaló demasiados balones, fruto de la intensa presión azulgrana .
El 0-1 entra ‘llorando’
Nada más reanudarse la contienda, Tello fue objeto de un discutido penalti de Etxeita que Sanabria se encargó de transformar con suspense. Santamaría llegó a tocar el balón, que entró ‘llorando’ en su portería. Fue el único disparo entre palos del gélido Betis en todo el encuentro.
El Huesca no se desmoralizó y, segundos después, perdonó una clarísima ocasión para empatar después de que el Cucho Hernández fallara un gol a puerta vacía tras recoger un rechace del portero Pau López.
Tello pudo cerrar el partido, pero en lugar de chutar prefirió darle un pase a Canales que Miramón cortó de forma providencial. Finalmente, el Huesca vio premiado su sacrifi- cio y constancia. Ferreiro, mal de- fendido por Guardado, puso las ta- blas con un testarazo en plancha. Y apenas seis minutos más tarde, Ri- vera firmó el definitivo 2-1 con una fantástica volea que desató la eufo- ria en El Alcoraz, donde cayó con justicia un Betis impotente
El Alcoraz vivió su primera victoria en la élite gracias a los goles de Ferreiro y Rivera