Lo de Munir es raro, lo de Levante no
No me había sentado en el sofá y el Levante ya iba ganando. Con el gol en contra, ya no me llegué a acomodar y menos cuando antes del minuto 20 ya perdíamos por 2-0. A partir de ahí, descontrol general, mediocampo con unos agujeros kilométricos con lo que la defensa sufría y navegaba y hasta ahí quedó la cosa. Ah, la delantera, sin balones, y una ocasión que se inventó Malcom con su velocidad no supo resolverla y todo quedó en nada, Dembélé tampoco apareció. Sólo la entrada de Denis aportó cierta coherencia técnica y en una jugada de categoría provocó un penalti que tiene tintes de salvador. Porque no dudo que la remontada y lo de la ida es lo que suele suceder cuando una alineación la forman cuatro titulares (Busquets, Dembélé, Vidal y Semedo), un debutante (Murillo), dos canteranos y cuatro suplentes. Algo parecido pasó frente a la Cultural Leonesa. Espero que no pase nada... Y en este ‘festival’ no estuvo Munir, curioso, después de cesiones, suplencias y demás, no se cuenta ya con él. El día que precisamente no tenemos ningún otro ‘nueve’. La cosa ha tenido un buen final vamos a decir, con el arreglo que se ha hecho con el Sevilla y pasa página. Pero la historia culé de este futbolista es realmente curiosa. Llegó al primer equipo, me parece que hace cuatro temporadas, también en un partido de Copa, un golazo, portadas de los periódicos a toda página, televisión dando imágenes a tope, seleccionado por España con urgencia para asegurar que no jugase con su selección original, gran enfado del presidente del Real Madrid. “¿Cómo es que Munir es de Madrid y lo tiene el Barça? ¿Qué ha pasado aquí?”. Conocimos su historia personal, un crack en casa. Entraba a formar parte de la plantilla del primer equipo de Luis Enrique donde coincidió con otro canterano, Sandro. Durante aquella temporada no jugaron mucho ni el uno ni el otro pero cuando lo hicieron cumplieron en su difícil situación de atacante del Barça.
La siguiente temporada, sin explicación ni causa referente en apariencia, le dieron la baja a Sandro. No como cesión ni nada, libre. No sé si alguna vez se sabrá la razón. Munir se quedó y entonces empezaron a fichar futbolistas, ¿recordáis? Arda, Vidal, Gomes, Digne... y Alcácer. La llegada de Alcácer, él no tiene la culpa, ¿y ahora qué hacemos con Munir? Solución, préstamo al Valencia al que acabamos de pagar 30 millones sólo por Alcácer -por André Gomes más-. ¡Vaya negocio! Era evidente que lo que iba a hacer el valenciano también lo podía hacer Munir. Este hizo algunos goles, entre ellos un golazo a nuestro equipo, y vuelta a casa. Otro curso. ¿y qué hacemos con Munir? ¿Traspaso o cesión? Al Alavés con el contrato terminándose. A final de curso otra vez en la plantilla del Barça, medio año, el jugador y sus asesores no aceptan renovar, el futbolista tiene la libertad a mano. Y, de golpe, es apartado, no se ha utilizado esta palabra, del grupo. ¡Qué raro! Que feo, todo esto, ¿no? Menos mal que el acuerdo con el Sevilla ha cerrado este mal sueño. Que tenga mucha suerte Munir. No penséis mal, no le conozco de nada, pero en su momento parecía la esperanza blaugrana y terminar así...