Un trilero anda suelto

Cuando hicieron el calendario asimétrico de la Liga se dijo que, entre otras, la razón era evitar que los implicados en competiciones europeas tuvieran rivales fuertes y viajes largos en el final de temporada. El asunto se tomó como una brizna de inteligencia y un acto cuasi de patriotismo, por el bien del fútbol español.

Pero ahora, a medida que se acerca ese final, observamos con que entre el 6 de abril y 5 de mayo, cuando se deciden cuartos y semifinales de la Champions, el que más sale favorecido por ese calendario asimétrico es… (redoblen los tambores, suenen los clarines, tararí, tararí): ¡el Real Madrid! ¿Qué raro, eh?

Veamos, tanto Barça como Atlético y Real juegan seis partidos entre las citadas fechas, tres en casa y tres fuera. Hasta ahí todo correcto. Pero mientras Barça y Atlético se enfrentarán entre sí antes del primer partido de cuartos, si es que se clasifican, el Real recibe al Eibar. Además de contra el Atlético, el Barça recibe a la Real y Levante, y viaja a Huesca, Vitoria y Vigo. Por su parte, el Atlético visita Camp Nou, Cornellà y Eibar y recibe a Celta, Valencia y Valladolid.

Al Real le bastará comprar abonos de tren de cercanías para jugar sus seis partidos sin salir de Madrid. Veamos: viajará a Leganés, Getafe y Vallecas, y recibirá a Eibar, Athletic y Villarreal. Conclusión:

Rubiales, madridista confeso, ha asumido un papel de trilero con Flo agitándole el cubilete. A estas alturas de la película no existen casualidades. Hasta con el calendario asimétrico, como en el caso del VAR, han hecho trampas para favorecer al de siempre. Vergüenza real