TRIUNFO SIN BRILLO
Zidane debutó con una victoria ante el Celta en un partido en el que el Madrid no mejoró en su juego Isco y Bale marcaron los goles del conjunto blanco en el que Zidane recuperó a los señalados por Solari
LO MEJOR La segunda parte de Marco Asensio que lideró la victoria del Real Madrid ante el Celta
LO PEOR La debilidad defensiva del Real Madrid y la poca fiabilidad del Celta cada vez que se acercaba al área de Keylor
El Real Madrid de Zidane comenzó con una victoria ante el Celta en el Bernabéu. Algo que, a día de hoy, es lo único que importa en el club blanco. Lo del juego, el fútbol es cosa de otos equipos y de la próxima temporada. La máxima del Real Madrid en estos momentos es ganar y si da la casualidad de que es con buen juego, pues enhorabuena pero nada más.
La mano de Zidane, el salvador blanco, se notó poco o nada en el juego del Real Madrid, pero sí en un once formado por la vieja guardia con Keylor, Marcelo, Bale e Isco como titulares. El francés apostó por salir con lo viejo conocido dejando lo nuevo por conocer en el banquillo. Una apuesta arriesgada viendo que Isco y Marcelo llevaban mucho tiempo sin jugar en una decisión con la que quiso acabar con el pasado inmediato del Madrid representado en la figura de Solari.
Zidane hizo un volver a empezar con los veteranos que le salió bien por el triunfo pero el Real Madrid volvió a dejar sensaciones de ser un equipo al que le cuesta marcar y que atrás es muy endeble. La suerte que tuvo el equipo blanco es que el Celta jugó con más miedo a perder que a ganar, algo lógico teniendo en cuenta que se está jugando la permanencia. Ese factor miedo fue clave en algunas de las jugadas del equipo gallego que desaprovechó ocasiones por precipitarse sus jugadores.
Fue el Celta el primero que avisó al Madrid, pero Keylor evitó el gol de Maxi Gómez. El Madrid reaccionó a esa acción, pero con más intención que otra cosa. La más clara la tuvo Bale que envió un balón al larguero a la media hora de juego. El Real abusaba de los centros al área pero no encontraba rematador mientras el Celta confiaba en aprovechar una contra para adelantarse en el marcador.
Ni uno ni otro tuvieron éxito en sus intenciones y se llegó al descanso sin goles. La segunda mitad arrancó con el Real Madrid apretando arriba y el Celta desaprovechando contras claras. Modric marcó en el minuto 56, pero el árbitro lo anuló a instancias del VAR por fuera de juego de Varane. El que sí subió fue el de Isco en el minuto 62 aunque tardó en convertirse en el 1-0 porque el VAR revisó si había fuera de juego de Benzema que le puso el balón de gol a Isco.
Ahí cambió el partido. El Real Madrid cogió confianza y el Celta se vino abajo. Los blancos, liderados por Marco Asensio, mandaban en el terreno de juego y en el marcador. Bale aumentó la ventaja del Madrid con el 2-0 en el minuto 75 tras pase de Marcelo. Ahí se acabó el partido. Zidane le dio minutos a Ceballos, Valverde y Mariano, otro de los desterrados por Solari. El encuentro tuvo poca historia. El Celta quería pero no podía ante un Madrid buscando más goles, pero ya sin la necesidad de ganar sí o sí porque la victoria ya estaba en su poder. El debut de Zidane tuvo el final feliz esperado por el madridismo que sigue ilusionado con el regreso de hijo pródigo. El fútbol, otro día
El Celta no aprovechó las facilidades que dio el Real Madrid en defensa