En Portugal nadie se toma a Trincao a broma
N Campeón europeo Sub-19, máximo goleador y asistente, tiene en el desborde la virtud que mejor define su fútbol
¿Trincao? Desde que el jueves empezó a circular este nombre vinculado al Barça estaba cantado que iba a ser carne de broma, con el efecto multiplicador de las redes sociales. Sólo para los muy metidos en el fútbol internacional, Francisco Antonio Machado Mota Castro Trincao, que así se llama el nuevo fichaje culé, era ya alguien más allá del chiste fácil. Empezando por los ojeadores de la Juve o del City, a los que el Barça se ha adelantado para que no le vuelva a pasar como con el lateral brasileño Yan Couto.
Futre le ve como “un jugador de banda, muy fuerte en el uno contra uno”
nTrincao forma parte de la nueva generación de talentos portugueses emergentes que lidera el colchonero Joao Félix, y de la que también forman parte los Gedson Fernandes o Rafael Leao. En este mundillo del fútbol, tan exagerado en todos los sentidos, lo primero que crece exponencialmente es el precio del futbolista que empieza a descollar. Lo segundo son las prisas por compararle con algún mito cercano. A Trincao ya se le ha asociado por su estilo de juego a Luis Figo e incluso al Cristiano Ronaldo primerizo. Naturalmente, ese sambenito más que una ayuda acaba siendo un lastre. Pero eso no impide reconocer que en Portugal a Trincao nadie se lo toma a broma desde hace ya tiempo. Internacional Sub-17, Sub-18, Sub19 y ahora Sub-21, su aparición en el escenario internacional fue en 2018 cuando, con su selección, se proclamó campeón de Europa Sub-19. Su aportación no fue anecdótica: junto a su compañero de equipo Joao Filipe lideraron la tabla de goleadores y de asistentes del torneo, con 5 tantos y 3 pases definitivos cada uno de ellos. Enel gol ambos relegaron a un tal Moise Kean y en el de la asistencia a Nicolò Zaniolo, entre otros.
Y eso que quienes más conocen a Trincao lo que más destacan de él es su desborde. Por velocidad, zancada, osadía y calidad de dribbling tiene mucha facilidad para dejar atrás defensas. Una leyenda del regate como el portugués Paulo Futre lo resaltó ayer en Radio Marca, mientras le apartaba de las odiosas comparaciones con CR7. “Trincao es un jugador de banda, muy fuerte en el uno contra uno, no en el gol, pero mucha calma, tiempo con él...”.
Zurdo, su posición más utilizada es la de extremo derecho, donde aprovecha sus diagonales. También puede ir a la otra banda o incluso por el centro. Recupera bastantes balones y, pese a su altura (1,85), no es un cabeceador. Debutó en el primer equipo del Sporting de Braga el 28 de diciembre de 2018, y esta temporada ya suma 22 partidos, una Copa de la Liga ganada al Oporto, tres goles y seis asistencias. Si con otras promesas no se decidió a hacerlo, con Trincao sí: el Barça no ha dudado en pagar 31 millones de euros. Habrá que confiar en que esta vez hayan acertado. Poca broma
Hn Además de Francisco Trincao, el FC Barcelona también anunció el fichaje del centrocampista brasileño Matheus Fernandes Siqueira, de 21 años, que también se incorporará a la plantilla una vez acabada la temporada, el 1 de julio de 2020. Hasta entonces jugará cedido por el Palmeiras en el Real Valladolid, según confirmó él mismo en las redes sociales por la mañana, curiosamente, antes de que se hiciera oficial por la noche. La entidad pucelana abonará su ficha esta temporada,
El club azulgrana pagará siete millones de euros fijos más tres en variables al Palmeiras, su club de procedencia. Firma por cinco temporadas, hasta el 30 de junio de 2025, y tiene una cláusula de recisión de 300 millones de euros.
Matheus se formó en el Botafogo, equipo en el que debutó con tan solo 17 años. Tras cumplir tres temporadas con un rendimiento destacado fichó en 2019 por el Palmeiras, donde ha acabado de despuntar y de despertar el interés de los grandes clubs pese a disputar sólo once de las treinta jornadas de la pasada liga brasileña, anotando un gol. A nivel internacional, participó en dos encuentros con la selección brasileña Sub-17 y en otros dos con la Sub-20.
183 centímetros
Por lo que respecta a su posicionamiento en el terreno de juego, el brasileño es un jugador diestro que está acostumbrado a moverse por la medular del equipo tanto de interior como de mediocentro. A pesar de su gran envergadura (1,83 m. y 67 kg.), se siente muy cómodo apoyando al equipo para salir con la pelota controlada desde la defensa
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