SUPERCOPA DE EUROPA / FINAL
N El guipuzcoano no desveló si alineará a tres centrales
n Julen Lopetegui, entrenador del Sevilla, recordó ayer en la rueda de prensa oficial de la UEFA en el Puskas Arena de Budapest que se trata de “una ocasión grandiosa, un título que nos hemos ganado el derecho a poderlo jugarlo y nos hace muchísima ilusión de competir la Supercopa ante un equipo como el Bayern y lógicamente estamos centrados en dar nuestra mejor versión para poder competir y superar a un rival grandioso cómo es el Bayern. No hay otra manera, estar centrados en eso y sin pensar demasiado en el contexto de dónde venimos y hacia dónde vamos”.
Lopetegui destacó que “estamos satisfechos de cómo han ido los entrenamientos y evidentemente nos harán falta partidos como a todos los equipos para coger nuestro mejor momento pero ahora nos toca afrontar esta final”.
El Bayern es, para el técnico, el peor rival posible. “Creo que es un equipo muy grande, y que no aparecía un equipo con esta contundencia y con está con esta capacidad futbolística desde hace tiempo y eso nos tiene que motivar e ilusionar y hacernos crecer en todos los sentidos”, explicó, al tiempo que no quiso desvelar si alineará a tres centrales. “Cómo vamos a jugar lo veremos porque somos un equipo bastante previsible en todo lo que hacemos. Veremos la decisión táctica, ahora está la voluntad, la ambición, el ánimo y lógicamente la ilusión que nos hace poder afrontar un partido de esas características y queremos dar nuestra mejor versión en todos los sentidos”
Hn Sevilla y Bayern de Múnich disputan esta noche en Budapest una Supercopa de Europa marcada por la pandemia de coronavirus. La prisa de la UEFA por abrir los estadios al público condiciona un choque convertido en prueba de fuego para el máximo organismo del balompié continental, que quiere ir aplicando la misma fórmula en la medida de lo posible para sus competiciones reinas, la Champions y la Europa League, de cara a la Eurocopa del próximo verano, la joya de la corona de Aleksander Ceferin.
Por lo pronto, los organizadores de la Supercopa esperan un ocupar 30% del total del aforo en el Puskas Arena, donde la mayoría de aficionados serán locales puesto que ni Sevilla ni Bayern de Múnich harán uso de las 3.000 entradas que les correspondían. El equipo bávaro desplazará a Hungría unos 2️.100 hinchas mientras que desde Sevilla viajaran apenas 500 seguidores, todos ellos obligados a costearse y a pasar una prueba PCR para poder entrar en el país centroeuroco han marcado las horas previas. “El viaje me genera dolores de estómago, como a cualquiera”, confesó Karl-Heinz Rummenigge, director gerente del Bayern de Múnich. “Procederemos con extremado cuidado. Tenemos interés especial en que Budapest no se convierta en un nuevo Ischgl”, ase
La UEFA utilizará el partido como banco de pruebas para abrir los estadios al público