Así gana el Barça en Movistar+

Savané se comió a Valdemoro como el Barça se zampó al Madrid en la final

En el último minuto de la final de la ACB ,conel Barça ganando de 20 puntos y el título sentenciado desde hacía rato, David Carnicero justificó la severa derrota blanca: “La NBA le robó al Real Madrid a Campazzo y Gabriel Deck ”.Y,a partir de ahí, si las lesiones de Randolph, Thompkins, Laprovittola, Llull y el coronavirus. Datos ciertos que pretendían consolar a la parroquia blanca. El Barça, a través de quien era entonces su jefe de deportes Albert Soler ,se quejó a principios de temporada de las locuciones

Hoy puedes seguir en la web de Mundo Deportivo los partidos de la Eurocopa de fútbol. A las 15.00, Ucrania-Macedonia del Norte; a las 18.00, Dinamarca-Bélgica, y a las 21.00, Países Bajos-Austria

Hde Movistar+. El club detectaba un cierto sesgo de las narraciones a favor del rival de turno del Barça, fuera quien fuera. Así, llegados a una final de la ACB ante el Madrid, todos los focos estaban puestos en los comentaristas para escrutar su trabajo, con la sensibilidad a flor de piel a estas alturas de los agravios históricos. La verdad es que el Barça fue tan superior en los dos partidos (más en el Palau que en el Wizink Center) que nadie tuvo muchas oportunidades para sentirse ofendido por un comentario más así o más asá por parte de las voces de Movistar+. La falta de emoción no los llevó a delatarse. Tampoco Amaya Valdemoro que, por prudencia propia o por desánimo, en esta final quedó muy tapada por un Sitapha Savané que se ha venido arriba y coge todos los rebotes de la retransmisión. Cuando detecta un silencio, él acostumbra a hacerse con el micrófono porque siempre tiene algo que decir. Los errores arbitrales que detectó Savané perjudicaban siempre al Madrid pero, al fin y al cabo, pelillos a la mar. Si no protestaba ni un alicaído Pablo Laso ,no iban a hacerlo los comentaristas. Lo que sobraba, y aún más en una gran final, es la cantidad de referencias personales a su pasado como jugador. Nos importa poco si él tiene en casa una foto con Lucio Angulo a punto de darle un hachazo, o si él defendía poniendo el brazo atrás del pívot rival y luego disimulaba… Una cosa es el tono pretendidamente desenfadado y otra es la elección del momento. Algo de dosificación y contención en los apuntes nostálgicos no iría mal porque en medio de un Barça-Madrid que es un ‘match-ball’ para el título, las aficiones no están para batallitas de exjugadores

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