Messi, contra la escuela azulgrana
Un partido de Messi, defendiendo los colores de su amada Argentina, contra Holanda –hoy Países Bajos- podría decirse que es un encuentro en el que el futbolista más brillante que ha tenido el Barça en su historia reciente se enfrenta a la llamada esencia del equipo azulgrana. Messi contra Frenkie de Jong, Memphis Depay y Louis van Gaal.
Messi, que aunque haya dejado de pertenecer al Barça sigue siendo considerado por los culés “uno de los nuestros”, contra la escuela del barcelonismo. Claro que seguramente saldrá el culé defectuoso –que escribiría Sergi Pàmies -que sostendrá que una selección holandesa entrenada por Van Gaal no juega igual ni representa lo mismo que identificaba a la Holanda cruyffista, pero ya sabemos lo que significa el fútbol de este país para el barcelonismo. No obstante, el aficionado culé, que vela por los intereses de su equipo y le importa un bledo el Mundial seguramente deseará la victoria de Messi para así tener lo antes posible a sus holandeses entrenando con su club.
El caso es que este partido de cuartos de final es el primer duelo de alto calibre que tiene Messi ysu Argentina. Primero por la calidad del rival y segundo porque solo vale vencer. El perdedor se va a casa. Adiós a la esperanza de ganar un Mundial, resultado que sin duda alguna pesaría más en la conciencia de
Messi que en la de Memphis o De Jong, todavía con una edad que les permite soñar con jugar otro evento de esta dimensión. Pero ello no exonera a “nuestros” holandeses del importante compromiso que tendrán el viernes. Dejar a Messi sin un Mundial es un objetivo que no está al alcance de muchos. Para Holanda es todo un señor desafío ●