Mundo Deportivo (Barcelona)

“ESPERO TENER UNA NOCHE HISTÓRICA”

- Celes Piedrabuen­a

→ La madrugada del sábado al domingo el boxeador barcelonés Sandor Martín (40-2-0, 12 KO) buscará conquistar Estados Unidos por segunda vez, después de dar un golpe sobre la mesa el año pasado ante Mickey García en Fresno. El púgil del KO Verdún se mide al local Teófimo López (17-1-10, 13 KOs) en el mítico escenario del Madison Square Garden de Nueva York, rival que ya se ha encargado de calentar el combate. ‘Arrasandor’ hace caso omiso a sus palabras y sólo piensa en que sea su boxeo el que hable en el ring, sabe que en caso de victoria se quedaría a las puertas de poder luchar por el ansiado título del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) del superliger­o.

Sandor, ¿qué representa para usted este combate con Teófimo López?

Sin duda, una oportunida­d mágica. La victoria sobre Mickey García estaba muy bien, pero no había un mérito deportivo en juego. Ahora tenemos la motivación de una eliminator­ia mundial, ganar nos daría acceso a luchar por el título mundial, por eso éste es el combate más importante de mi carrera deportiva.

Será su segunda experienci­a en Estados Unidos, ¿qué aprendió en la primera ante Mickey Garcia, a la que no llegó al 100%?

Ante Mickey no es que no estuviera al 100%. Sí que estaba preparado e iba muy bien entrenado, pero yo sé que puedo dar más de mí en el ring, principalm­ente porque no competí en mi categoría de peso, fue un par de kilos por encima, y porque también era mi primera gran oportunida­d. Puedo hacer muchas más cosas de las que hice con Mickey y esconder un poco esto pienso que nos beneficia.

¿Qué se puede esperar de Sandor en el Madison Square Garden?

Una gran versión mía encima del ring. Lo único que quiero es que sientan orgullo del boxeador que baje del ring del Madison Square Garden. Los que me siguen saben que soy un deportista de primer nivel que se prepara física y mentalment­e en las mejores condicione­s y que subiré al ring para dar la mejor imagen posible. Estoy tranquilo porque sé que el trabajo está bien hecho y ahora sólo queda de cerrar una noche que espero sea histórica.

Es su segunda pelea este año. Este número, ¿está bien?, ¿son pocas?

Para mí no es un problema que éste sea el segundo combate del año. En el nivel en el que estamos no se puede combatir de forma tan frecuente. El combate llega cuando tiene que llegar, llegamos en buenas condicione­s y muy bien. De Teófilo espero una gran versión, que se haya preparado lo mejor posible, yo lo he hecho. Él tiene toda la presión. Él es quien tiene todas las críticas, no yo. Él es quien ha hablado antes de tiempo y si no da la talla el problema será suyo, yo sé lo que tengo que hacer y estoy convencido y centrado en mi trabajo.

Teófimo López nunca ha salido de Estados Unidos.

No es un problema. Al final, un ring es un ring, las cuerdas son las cuerdas y los guantes son los guantes, no es algo que me preocupe. No me preocupa ni el recinto, ni el momento, ni las luces, ni la ciudad. Lo importante es lo que pase dentro del cuadriláte­ro y pienso que para él también tendría que ser así.

Una de las opciones que estudiaron antes que la de Teófimo era la de Ryan García, pero no salió, una lástima, ¿no? Sí, con el combate de Teófimo hacia septiembre hubo un primer contacto de tentativa, pero no se dio. Salió la posibilida­d de boxear con Ryan García y estuvimos en conversaci­ones, y finalmente se ha dado este combate con Teófimo. Es un boxeador que habla mucho antes de tiempo, a él le gusta hacer esta película y a mí no. Cuando él se dedica a hablar yo me dedico a entrenar. Pienso que el boxeo pone a todo el mundo en su sitio. En este sentido, estoy tranquilo. Él que haga su papel que yo haré el mío, que es el de boxear y el de ganar. Si él quiere hacer el papel norteameri­cano, de hablar, de menospreci­ar, que lo haga. No me preocupa ni me importa, lo que me importa es lo que yo sea capaz de hacer el sábado encima del ring.

Teófimo lo ha menospreci­ado, ¿le puede afectar? Usted dijo que su punto débil era su padre.

Como se suele decir, de tal palo tal astilla. A mí, lo que me han enseñado en casa es a ser buena persona, buen deportista, un referente y a trabajar duro para que salgan las cosas. Ellos se dedican mucho a hablar, a chillar y a menospreci­ar. Hacen mucho ruido y yo no soy así, ya veremos quién tiene la razón y quién sale con el brazo en alto. El boxeo necesita representa­ntes que sean deportista­s de verdad, de la cabeza a los pies; señores encima y debajo del ring y y ellos no se comportan en esta línea.

Y después del sábado, ¿por fin podría ir a por el anhelado Mundial?

El siguiente combate, en caso de ganar, tendría que ser con el ganador de Reyes Progreis con José Carlos Ramírez, la defensa que hay ordenada por Prograis, el campeón del mundo, después iríamos nosotros. Todos los esfuerzos están centrados el sábado y salir ganadores. ¿Cómo está siendo su aclimataci­ón en Nueva York? ¿Cuál es su agenda? Estamos concentrad­os y haciendo bien nuestro trabajo. Nos levantamos a las siete de la mañana y hacemos el primer entrenamie­nto hacia las ocho, la parte física. Después damos una vuelta por la ciudad, un poco por la zona del hotel y lo tenemos todo al lado. Llegamos al hotel para comer y descansar y hacer el entrenamie­nto de boxeo de la tarde. Éste es nuestro día a día, disfrutand­o un poco de la ciudad, pero no pensamos en otra cosa que no sea ganar el sábado.

Será padre por primera vez a principios de año, ¿cree que le hará cambiar como boxeador?

Nacerá para mayo y estoy muy contento de cerrar el año de esta forma, sabiendo que seré padre. Al volver de Nueva York sabremos el sexo del bebé, así que ilusionado también. Espero que el hecho de ser padre no me cambie como boxeador y que si lo hace sea para ir a mejor, que lo pueda coger como un motivo más para dar una estabilida­d a mi familia y que les pueda encaminar la vida un poco mejor. Éste sería mi propósito, haciendo lo que sé, que es boxear, que es lo que llevo haciendo toda la vida. Poder dar mayor estabilida­d a mi familia sería maravillos­o y el primer paso pasa por el Madison el sábado y el resto ya será historia.

Usted, que también ejerce de comentaris­ta y analista de boxeo, ¿en qué detalles tenemos que fijarnos sobre el ring el sábado?

El combate será como siempre. Tenemos el plan A, B, C y D, todo el abecedario completo listo, nos podemos adaptar a cualquier situación. Las esquinas serán muy importante­s en este combate por la actitud de uno y otro entrenador y esto ayudará en el ring. Al final, lo que sea el combate será y según lo que él proponga propondrem­os nosotros. Tenemos lo necesario para hacer algo bueno encima del ring ●

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FOTO: JUAN CARLOS MORANT Sandor Martín afronta la madrugada del sábado al domingo su segundo combate en Estados Unidos

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