El Espanyol se complica la vía directa
→ Desperdició una ocasión de oro para haberse acercado al líder tras empatar ante el Elche y si hoy ganan Eibar o Valladolid se descolgará mucho
→ El Espanyol desperdició ayer una nueva ocasión para haberse acercado al liderato, un nuevo frenazo en sus aspiraciones para lograr el billete directo para Primera. Logró otro insuficiente punto, otro empate y ya van 15. Ayer ante el Elche, un rival directo en la pelea y durmió cuarto, a 4 puntos del Leganés, el líder, y a uno del segundo, el Eibar, en zona de ascenso directo. Aunque hoy deberá estar pendiente de resultados para ver a cuánta distancia se queda de la cúspide. Otro bofetón.
Y doloroso pues el Espanyol se avanzó hasta en dos ocasiones al Elche con tantos de Puado en el arranque y de Braithwaite en la recta final, pero se dejó empatar, pinchando el globo de un triunfo que le hubiera llevado a la segunda plaza. Ahora a mirar de reojo los resultados de los rivales, esperando pinchazos de los gallitos.
Rezar para que el Eibar o el Valladolid no ganen hoy, pues de hacerlo alguno, la zona de ascenso directo se alejará a cuatro puntos para un irregular Espanyol que se ha olvidado de vencer. Preocupa.
Buenas sensaciones en el inicio en un Martínez Valero con entrada de lujo y presencia de seguidores pericos en las gradas.Y pronto pudieron cantar un gol del Espanyol. En el minuto 2, una vertical jugada entre Brian Oliván, Braithwaite y Puado, acabó con el gol del último para culminar una brutal contra.
Puado acarició el segundo minutos después pero se ‘hartó’ de balón y no vio a Jofre, mejor colocado, desperdiciando una buena ocasión para el 0-2. Y como suele pasar, quien perdona, lo paga. Al filo del minuto 11 y en la primera aproximación con cara y ojos del Elche, llegó el empate. La zaga perica no se mostró contundente y Mourad se inventó un golazo para devolver las tablas al marcador.
Vuelta a empezar para el Espanyol, pero a diferencia del inicio, el Elche se puso el disfraz de dominador y aculó a un once perico al que le costaba una vida hilvanar jugadas con veneno. Pese a todo Jofre tuvo un par de ocasiones para haber he- cho el segundo tanto peri- co. Aunque el Elche llegó al descanso mandando y sometiendo a un Espanyol que empezó a parecerse al del partido ante el Andorra. Nico Fernández tuvo el segunpoco do local y también hubo la jugada polémica del día cuando Joan García atajó el balón y cayó dentro de su portería. El Elche reclamó gol pero el VAR entró a revisar y desestimó que el esférico hubiera traspasado la línea de gol.
En la reanudación el duelo se equilibró aunque el Elche se mostró más intenso ante un Espanyol al que le costaba encontrar a los delanteros. La polémica la protagonizó Joan García y la pitada estelar de su ex afición se la llevó Pere Milla cuando saltó al verde por un lesionado Pol Lozano.
El centrocampismo estéril se adueñó del duelo, dominando un más el Elche pero sin llegadas peligrosas en las dos áreas. Languidecía el duelo con un empate que no satisfacía a ninguno.
Pero curiosamente, volvió a aparecer el de siempre. En el 71’ una contra que abrió Sergi Gómez al espacio, no peinó el esférico Gastón Valles, anulando un posible fuera de juego, llegando a Omar, que puso un centro exquisito. Y Braithwaite se inventó un cabezazo para el 1-2.
El Espanyol se volvía a avanzar pero tocaba sudar sangre para amarrar el valioso triunfo. Tuvo Puado la sentencia en sus botas en el 78’ pero Bigas le robó la cartera in extremis cuando ya encaraba.
Pero poco duró la alegría en casa de un Espanyol que volvió a despistarse en defensa. Otro golpe tras haberse avanzado. Otra vez no supo aguantar la ventaja. En el 81’ una jugada a balón parado le ‘mató’. Una falta fue rematada de primeras por Donald, colándose entre varios pericos: 2-2.
Acoso y derribo en la recta final de un Elche empujado por la grada ante un Espanyol que se defendía con todo. El duelo fue un correcalles pero el Espanyol tuvo el triunfo en el último suspiro, en el 96’, pero Braithwaite cabeceó y el meta Dituro salvó el tercer tanto perico. Nuevo tropiezo y se aleja la cima ●