Al Espanyol se le complica el ascenso
→ Sumó ante el Sporting su cuarto empate seguido y queda a 6 puntos del 2º mientras que solo 3 le separan de estar fuera de la zona de playoff
→ Son cuatro empates seguidos y por ende 8 puntos los que ha dejado de sumar el Espanyol en las últimas jornadas. Una losa que pesa mucho en su contra en el intento de lograr el ascenso sin necesidad de pasar por el playoff. Este domingo recibió al Sporting de Gijón en un Stage Front Stadium que presentó su mejor entrada de lo que va de temporada, pero el conjunto blanquiazul fue incapaz de imponerse al cuadro asturiano, que llegó a Cornellà-El Prat de capa caída tras dos derrotas en las últimas jornadas, incluyendo un 0-3 ante el Villarreal B el pasado fin de semana.
Durante la primera mitad, ni unos ni otros escenificaron sobre el césped ser equipos capacitados para lograr el ascenso a Primera cuando la presente temporada eche el cierre. Dominó la posesión de balón ligeramente el Sporting de Gijón, pero más en campo propio que en el del rival, y protagonizó un mayor número de disparos el Espanyol, pero ninguno de ellos fue entre los tres palos de la portería defendida por Yáñez, tan espectador como Joan García durante todo el primer acto.
La acción más cercana a un gol que aconteció entre el pitido inicial y el descanso sucedió en el minuto 36, cuando un buen centro de Brian Oliván desde la izquierda, tras llegar el lateral perico a la linea de fondo, sobrevoló el área, por encima del propio Yáñez, para llegar a Gastón, que esperaba en el segundo palo, pero el joven uruguayo, a puerta vacía, remató desviado. Fue una de esas jugadas que sin duda se cuelan en el repaso de los fallos inexplicables de la jornada, aunque en la descarga de Gastón haya que decir que el buen centro de Brian Oliván, un oasis en una primera parte realmente insulsa, le sorprendió.
Minutos antes, no obstante, sí hubo una acción en la que el balón besó la red de una de las porterías. Concretamente fue en el 29’, cuando Mario González se coló entre la defensa del Espanyol para superar a Joan García en el mano a mano, pero el delantero burgalés lo hizo en fuera de juego y el tanto quedó invalidado. Así que, por demérito de unos y otros se llegó al tiempo de asueto con el ‘resultado gafas’ (0-0) todavía en el marcador y los 25.015 aficionados presentes en el Stage Front Stadium con el grito de gol esperando a ser desempolvado de sus gargantas.
Pasado el descanso, volvió a rodar el balón sobre el verde pero el guion de partido no cambió demasiado respecto a la primera mitad y el 0-0 se mantuvo perenne en el luminoso. Incluso el árbitro, Milla Alvéndiz, se unió al despropósito general al verse completamente superado tras un rifirrafe entre Brian Oliván, un futbolista bravo e intenso pero para bien y para mal, con mecha corta, y Haissem Hassan, uno tan talentoso como proclive a todo aquello, fingimientos incluidos, que priva a un buen jugador de ser uno excelente. Más de cinco minutos estuvo el partido parado, quedando su ritmo cortado por completo cuando la acción pudo resolverse con mayor facilidad.
En cuanto a ocasiones de gol, lo más cerca que estuvo de marcar el Espanyol en el segundo acto fue cuando Braithwaite dispuso de un remate desde dentro del área en el 85’ que atajó Yáñez con seguridad. Y también tuvo la suya el Sporting, con Queipo internándose en
Manolo González “Lo que no puedo controlar es tener ocasiones claras y no meterlas”
“Quedan cuatro partidos y el equipo tiene que estar preparado para competir; yo veo el vaso medio lleno”
el área en el 90’ para acabar rematando alto.
Al final, un punto para cada equipo. Insuficiente para el Espanyol, que anda pensando en alcanzar los puestos de ascenso directo y como se descuide no juega ni el playoff. Muy válido , sin embargo, para un Sporting de Gijón irregular, que firmaría con sangre ser uno de los cuatro que luchan por la tercera y última plaza del tren que lleva a Primera división ●