Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
ESPECTACULAR
Nadal enseña galones a Chung, y hoy ante Zeballos, uno de sus cuatro verdugos en una final en tierra Murray se venga de Ramos en un duelo titánico para no perderse la ‘semi’ con el duro aspirante Thiem
El show debe continuar tras una espectacular jornada de cuartos, y lo hará porque en semifinales estarán los tres jugadores que desde el principio se postulaban como principales aspirantes al Barcelona Open Banc Sabadell-65 Trofeo Conde de Godó. El primero, por historial y estado de forma, el nueve veces y vigente campeón Rafa Nadal, que disputará su décima semifinal, cifra que persigue en su casillero de títulos y que ya estableció en Montecarlo.
El nº 1 mundial posicionaba en la lista a Andy Murray, y demostró orgullo para remontar a un espléndido Albert Ramos, que sirvió para encuentro, pese a que había perdido días atrás con él en Montecarlo, que viene de una lesión de codo y resultados negativos. Se remangó durante tres horas,
Abrirá hoy las semifinales (13.30 h) contra la seria amenaza austríaca Dominic Thiem, primera de ambos en el torneo. A las 16 h., Rafa Nadal se cruzará con el invitado sorpresa, el argentino Horacio Zeballos, quien se ha trabajado en la pista la plaza dejada vacante en el cuadro por Kei Nishikori. En su segunda participación, victoria sobre el ruso Karen Kachanov 6-4 y 6-1, y adelante.
De 32 años y 84º del mundo, dista mucho de tener la calidad y el pedigrí de los otros supervivientes, pero puede decir bien alto que es el único de los ‘mortales’ del circuito capaz de ganar una final sobre tierra batida a Nadal. Sí, fue en un lejano 2013, Viña de Mar, y después de un período de baja de ocho meses del balear por el primer aviso serio de sus rodillas, pero en la historia queda que hizo algo que sólo ha estado al alcance de los otros tres ‘Big Four’, Novak Djokovic, Roger Federer y Murray. Para Zeballos, zurdo como Nadal, un recuerdo imborrable, en el caso de Rafa una anécdota. En Roland Garros 2010 había superado al suramericano por 6-1, 6-2 y 6-3.
Y el actual Nadal anda sobrado de confianza y tenis, aunque la superficie aún no esté tan rápida como le gustaría. Lució ayer el sol, pero pide mas calor en aras a una pista seca, que su pelota toque el suelo y salga disparada hacia arriba, torture al rival.
Venció 7-6 (7-1) y 6-2 al surcoreano Hyeon Chung con la seguridad del que e siente en racha. Se vio 1-3 abajo de entrada, “pero cuando recuperé el break, 3-3, vi el partido en mis manos”, explicó Nadal. Había vigilado al prometedor asiático, 20 años, a través de vídeos y le llegaron mensajes en el vestuario de que pegaba muy fuerte de revés. “Salí un poco intimidado. Le tiraba a la derecha pero vi que era mejor que hiciera mi juego, que me beneficiaba mi derecha cruzada contra su revés”, apuntó Rafa. En seis juegos radiografió al valiente Chung, que mostró descaro y mucha pegada. “Ganó en la previa a Gulbis y Pella. Después a Istomin, Kohlschreiber y a Zverev sin ceder un set. Algo así no es por casualidad”, recitó de memoria el cuadro seguido por Chung.
No se le escapa un solo detalle, menos cuando comprueba a diario que no deja de ir a más