Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
A Honda le llueven los contratiempos
Vandoorne será sancionado con 15 puestos en parrilla en el GP de Rusia por cambiar todo el motor
Tremendo jarro de agua fría para McLaren-Honda en Rusia. El binomio empezaba a tener motivos para pensar en mejoras tras un inicio de temporada desastroso debido a los fallos del motor nipón. Con la evolución progresiva del chasis y las sensaciones positivas con las que se terminaron los test de Bahrein, los fallos en el propulsor volvieron a afectar a Vandoorne ayer en Sochi. Honda aseguraba tras las pruebas de Sakhir que creía haber dado con la tecla correcta para que no se repitieran las averías y que ello era clave para una futura evolución en busca de mayor potencia. Es cierto, acertaron con las soluciones en el turbo y el MGU-H, que esta vez sí funcionaron correctamente, pero lo que no esperaban es que en Rusia, a las primeras de cambio, surgiera un contratiempo distinto, esta vez con el MGU-K.
Así pues, después de no poder participar en la carrera de Bahrein por una avería en la unidad de potencia que apareció en la vuelta de calentamiento, Vandoorne será sancionado con 15 posiciones en parrilla al cambiar la totalidad de componentes de su motor y superar el máximo de 4 elementos permitidos para todo el año en cuanto a MGU-H y turbo. Por suerte, la mala suerte no salpicó esta vez a Fernando Alonso, que pudo completar una buena jornada de libres terminando en la posición 12. Eso sí, a poco más de dos décimas de Pérez, que fue décimo, y a menos de una décima de Ocon. Sin embargo, con lo visto en la otra parte del garaje de los de Woking, parece demasiado pretencioso soñar con la Q3, especialmente por la gran mejora de tiempos que suelen lograr los Force India en clasificación.
El objetivo de Alonso debe ser el de terminar su primera carrera del año tras tres abandonos consecutivos a la espera de que la situación mejore. De momento, Yusuke Hasegawa, jefe de Honda en la F1, continuó sin dar explicaciones y defendiendo la decisión de los de Sakura de cambiar un concepto de motor por el que apostaron durante dos años por otro que no han sabido acoplar al MCL32. “No creo que hayamos cometido un error. Teníamos que cambiar muchas costas y en algunas áreas lo hemos hecho y hemos reducido el peso, pero no hemos podido sacar la potencia de la combustión. Suena a excusa, pero seguimos necesitando tiempo”, explicó el nipón, sabiendo que precisamente el mayor problema es que Alonso no está dispuesto a conceder más oportunidades