Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Cara y cruz tras los cuatrienios
Rojo no se lució después del legado de Luis Fernández y Bielsa sacó el mejor rendimiento acabada la era Caparrós
Cuatro años al frente de los rojiblancos es, tal y como está el fútbol, un acontecimiento inédito. Más aún cuando Valverde no se ha extendido en el cargo más de dos campañas. Esta vez ha sido el doble, siguiendo la estela de otros entrenadores de lustre en el Athletic en los últimos años.
Luis Fernández estuvo un cua- trienio allá por los años noventa cuando Arrate apostó por el míster de Tarifa. El primer año no estuvo nada mal en este nuevo ciclo, ya que el Athletic accedió a sexta plaza para ir a Europa y en el siguiente accedió a la Champions League con un dificilmente esperable segundo puesto. Así se remediaba una situación complicada, ya que el club venía de una campaña en la que el descenso estuvo cerca de los leones: en el curso 95/96 habían acabado decimoquintos, a seis puntos de la hecatombe. Amorrortu había relevado a Stepanovic y pudo evitar un disgusto mayúsculo.
Después de la estancia de Luis Fernández, de su cuatrienio, llegó Rojo y los resultados no acompañaron. Los leones terminaron decimosegundos en la Liga mientras que en la Copa fueron eliminados en octavos por el Racing.
Años después hubo otro cuatrienio con el liderato de Caparrós. ¿Cómo resultó el relevo en el banquillo después de esa era, como la de Valverde? De cine, porque con Bielsa se llegaron a dos finales, una de ellas europea. Ahora se abre otra situación semejante. Han pasado con nota los cuatro ejercicios de Valverde. ¿Cómo resultará el siguiente? Tiene buena pinta y el primer año de cada técnico con Urrutia ha sido feliz