Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Rotaciones en el inicio
Kuko Ziganda está tirando de rotaciones en este inicio de competición. El míster rojiblanco realizó cinco cambios en su once titular contra el Getafe respecto al que alineó en Atenas, hizo otro tanto contra el Panathinaikos en Bilbao y el punto culminante llegó en Ipurua, cuando alineó a siete futbolistas ‘nuevos’ respecto a la vuelta europea contra los griegos. La jugada le salió bien porque el Athletic se trajo los tres puntos para Bilbao en la visita al Eibar de Mendilibar, con un partido más que destacado de Kepa, que realizó intervenciones de mérito e hizo bueno el tanto marcado por Aduriz tras un buen centro de Williams.
El entrenador navarro parece tenerlo claro. La temporada es muy larga y es necesario dosificar a sus futbolistas para llegar en condiciones a la recta final, cuando se disputan los objetivos definitivos. De momento, el equipo ya ha conseguido el primero, lograr una plaza en la fase de grupos de la Europa League, y el segundo, comenzar bien la Liga, también se puede dar por descontado.
Hay entrenadores partidarios de las rotaciones y otros no tanto. La ventaja de repartir los minutos es que los futbolistas llegan con las piernas frescas a los meses decisivos, cuando se pone en juego lo más trascendente de cada temporada, y también que intervienen la mayoría de los miembros de una plantilla y eso sirve para que todo los futbolistas se sientan protagonistas, algo muy importante cuando llegan las bajas en forma de sanciones o lesiones.
En el lado contrario están los que opinan que es mejor mantener un bloque titular estable para ensamblar todas las piezas, algo que también tiene su trascendencia sobre todo en los inicios de temporada, cuando es necesario armar un equipo