Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
VAR de bronce en el Lealtad-Bilbao Athletic
Un hincha local saltó al campo para enseñar las imágenes en su móvil al árbitro asistente, al entender que se había equivocado tras anular un gol al club asturiano
El debate sobre la convenciencia de utilizar el VAR o el ojo de halcón ha cobrado actualidad en las últimas semanas después de la jugada vivida en el Valencia-Barcelona de Mestalla, en la que Iglesias Villanueva no concedió un claro gol a Messi a pesar de que el balón botó claramente dentro de la portería del Valencia. La próxima temporada esta tecnología, que ya se usa en la mayoría de las Ligas más importantes de Europa, estará aplicada en la Liga española, pero el fútbol modesto no se beneficiará de este tipo de ayudas extra para analizar las jugadas más polémicas que se producen en cada encuentro.
De momento, en Segunda B se las arreglan como pueden. Al menos, eso se desprende de la curiosa circunstancia que se dio en el partido que el pasado domingo a mediodía disputaban el Lealtad y el Bilbao Athletic en el campo de Les Caleyes de la localidad asturiana de Villaviciosa.
En un momento de dicho encuentro, un hincha del equipo local protagonizó una curiosa anécdota después de que el árbitro, a instancias de su asistente, anulara un gol al conjunto asturiano por fuera de juego. Indignado por la, a su juicio, equivocada decisión arbitral, el seguidor asturiano entró en el terreno de juego y se acercó al juez de línea para enseñarle, a través de su móvil, que el tanto, a su entender, estaba mal anulado.
La jugada en cuestión sucedió superada la hora de juego, después de que un disparo de Montero desde la frontal del área fuese desviado por el guardameta del filial rojiblanco, Unai Simón, con una gran estirada. El balón, sin embargo, quedó muerto en el área de los cachorros y Cueto aprovechó para enviarlo a la red. Cuando los jugadores del Lealtad, que lucha por huir de la zona de descenso, celebraban ya el gol, el árbitro, a instancias de su juez de línea, lo anuló por fuera de juego.
Fue una decisión que desencadenó las protestas de los aficionados del equipo asturiano y la posterior entrada de un hincha al terreno de juego para enseñar su teléfono móvil al asistente con la intención de advertirle de su error. El aficionado fue sacado del campo y el árbitro no varió su decisión.
Racha positiva de los cachorros
Después, el conjunto bilbaíno acabó llevándose la victoria en el partido (0-1) gracias a un gol de Dopi a falta de cuatro minutos para el final. De esta forma, el Bilbao Athletic encadena una racha positiva de tres victorias y tres empates que le han permitido subir hasta la séptima plaza de la tabla, con 26 puntos y a solo cuatro de los puestos de playoff