Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Vecinos de Rossi van a por The Ranch
Han presentado un recurso por limitación de la libertad personal por el exceso de ruido y polvo, y porque le faltan permisos
Hablar de The Ranch es referirse a la pista de dirt track de Tavullia donde Valentino Rossi está invirtiendo en esa segunda juventud como piloto a los 38 años y también en el futuro de sus chicos de la VR Academy que ya nutren las tres parrillas del Mundial de motociclismo. Pero no todos sus vecinos en Tavullia están de acuerdo con lo que allí se cuece y están movilizándose para cerrar The Ranch, según informan diversos medios de comunicación italianos.
El futuro de The Ranch está ahora mismo en manos del tribunal administrativo regional (TAR) del Marche italiano, que en breve debe sentenciar sobre el recurso interpuesto por tres vecinos que impugnan los métodos y procedimientos para la implementación del complejo del motor, así como por la limitación de la libertad personal debido al ruido y polvo excesivos.
Las obras se iniciaron en 2009 cuando Graziano Rossi adquirió una parte vallada para construir una pista, ya contra el parecer de los vecinos, y consiguió el cambio de calificación de área agrícola a área educativa/escolar variando así el plan regulador y pudiendo comenzar las obras que acabaron en 2011. Y los vecinos se agarran a que presuntamente se construyó sin obtener la preceptiva evaluación del impacto ambiental y a que debería sostener vínculos con la comunidad abriéndolo al público, cosa que no sucede en la actualidad.
En declaraciones recogidas por ‘La Gazzetta dell Sport’ Albi Tebaldi, administrador de la VR46 y de Test Track, propietaria de la pista, ha explicado que “confiamos en que el TAR nos dé la razón. En caso contrario, apelaremos. El uso del circuito está permitido de las 14:30 a las 19:00 horas y podríamos utilizarlo todos los días pero, considerando las carreras y el mantenimiento, rodamos en torno a cuatro días al mes”.
“El proceso técnico de construcción fue complejo, pero cumplimos con todas las peticiones y pasamos todo tipo de controles. Antes de los entrenamientos revisamos las motos y dos sonómetros detectan los límites de ruido. La federación italiana y el ARPAM (la agencia ambiental) realizan sus propios controles para conceder la homologación de la pista”.
Sigue relatando la mano derecha de Valentino que “en torno al Ranch hay unas quince casas, pero solo tres, que además no son las más cercanas, se quejan con una actitud casi persecutoria”, apunta Tebaldi.
El plan de futuro de Valentino es ampliar la utilidad de su Motor Ranch. Se han instalado ocho torres de luces para facilitar el entrenamiento en invierno y tienen en proyecto un circuito oval y un pequeño museo. También se plantean la instalación de una grada para que el público pueda disfrutar de los entrenamientos, algo que en estos momentos sólo es posible desde una carretera a centenares de metros como bien saben los fans del ‘Dottore’ que peregrinan a Tavullia.
Y los próximos 16 y 17 de diciembre se va a celebrar ‘La 100 km dei Campioni’, una carrera de resistencia de flat track que anualmente se celebra en el Ranch de Tavullia con el propio Rossi, los pilotos de la VR46 Riders Academy y numerosos invitados, este año el campeón del mundo de Moto3 Joan Mir, entre ellos