Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Una negra tarde de verano
Athletic y Alavés se vuelven a ver las caras tras la suspensión de la Euskal Herriko Kopa en Lasesarre
La tensión acostumbra a estar a flor de piel en los derbis. Los roces se miran con lupa. El último precedente entre el Athletic y el Alavés sobrepasó los límites. Ni siquiera pudo acabarse después de un par de acciones alejadas del reglamento que colmaron la paciencia de Palencia Caballero. Era la final de la I Euskal Herriko Kopa y quedó desierta.
Todo se empezó a torcer mediado el segundo tiempo, cuando los leones ganaban por 2-1. Vesga y Aduriz habían anotado para los de Ziganda e Ibai marcó para el cuadro gasteiztarra. Pina derribó a Muniain y el trencilla señaló falta. Alexis Ruano entró en colera y fue expulsado con roja directa por protestar. No se quedó ahí la cosa. El central se acercó de nuevo al trencilla y le cogió de la cara diciéndole un par de cosas. Luego se marchó. Palencia Caballero reunió a los capitanes, a Muniain y a Fernando Pacheco, y les dejó claro que de repetirse algo similar suspendería el choque.
En la recta final todo explotó después de que Christian Santos consiguiera el 2-2. En el minuto 89, Óscar Romero se lanzó a por Saborit en la banda en una entrada muy dura abajo. El árbitro no se lo pensó: roja directa. El lateral se revolvió y agarró al babazorro mientras se levantaba. Se montó una tángana entre todos los futbolistas que no fue a mayores porque fundamentalmente todos querían poner calma. Palencia Caballero decidió dar por concluido el partido, que no se disputara el tiempo restante ni que se lanzaran los penaltis para dictaminar el vencedor.
Los insultos de Alexis
Las caras en el palco de Lasesarre eran un poema. Ahí estaba Juan Martínez de Irujo, que era el encargado de entregar la txapela al campeón. Los futbolistas tampoco daban crédito sobre el verde. Finalmentetodosseretiraronavestuarios. El colegiado, que milita en Segunda B, no dio ninguna explicación a los jugadores.
Se habló incluso de una sanción a Alexis, pero el babazorro se libró por la redacción del acta: “Fue expulsado por dirigirse a mí, mostrando una actitud agresiva y en reiteradas ocasiones, en los siguientes términos: “¡Eres un puto sinvergüenza, hijo de puta!”. Una vez expulsado se encaró a escasos centímetros de mí, gritándome en tono amenazante, y justo después me agarró fuertemente de la cara en actitud de desprecio”. Alexis no tardó en disculparse a través de las redes sociales. “Quiero pedir disculpas al árbitro, a los aficionados del Alavés, del Athletic y del fútbol en general. Me arrepiento. No voy a buscar excusas, nosotros tenemos que ser un ejemplo”, señaló el futbolista albiazul