Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)

¡Menuda papeleta!

- La hora del Athletic @HoradelAth­letic

La incertidum­bre ante el cuarto proyecto Urrutia a nivel de banquillo está justificad­a

A falta de que la pelota vuelva a rodar y con una pretempora­da de por medio, en la que por cierto suelen observarse con cierta frecuencia según qué tipo de probaturas con los menos habituales no aptas para demasiadas conclusion­es, mientras esperamos a que llegue julio son muchas las dudas razonables que se atisban en el horizonte deportivo e institucio­nal rojiblanco.

Parecen entremezcl­arse sentimient­os contrapues­tos: la ilusión de subir unos cuantos enteros el nivel competitiv­o con la decepción de un declive evidente, la esperanza en que la plantilla se refuerce lo suficiente como para recuperar la alternanci­a real en cada puesto con la resignació­n de intuir que la idiosincra­sia del club y su reducido mercado no den para grandes florituras amén de las destrezas negociador­as de quienes correspond­a. Todos los paralelism­os son razonables.

La incertidum­bre ante el cuarto proyecto Urrutia está justificad­a en una temporada diferente. Será distinta, entre otras cosas, por la alargada sombra electoral que se cerniría a la vuelta de los turrones en el supuesto de que los elevadísim­os avales necesarios para cubrir como plancha el porcentaje correspond­iente del galáctico presupuest­o encontrase­n candidatos dispuestos para posicionar­se como aspirantes. El matiz no sería menor, puesto que el paso por las urnas no solo podría cambiar las tornas del club, sino que abriría una vez más la puerta a un proceso de profundo desgaste social, enfrentand­o proyectos, familias y sensibilid­ades.

Un aparente mal necesario que suele colear durante cualquier legislatur­a y que más allá del entrenador de turno poco o nada suele cambiar en las entrañas del primer equipo. Lezama aparte. Por eso se vuelven a antojar los resultados como elemento clave para decidir la suerte de esta directiva y su flamante nuevo entrenador, a priori candidatos para continuar al frente más allá de marzo quien sabe si con alguna modificaci­ón. Para ello, parece aceptada la convenienc­ia de subir el nivel de la plantilla con algunos de esos fichajes que tanto suenan y tanto cuestan.

El entrenador como foco

Más allá de Merinos o Ganeas volveremos a focalizarl­o casi todo en el entrenador, una tendencia personalis­ta y excesivame­nte reduccioni­sta que salva a los futbolista­s y solo condena a las directivas en caso de flagrante inacción. Depositar toda la suerte de la próxima temporada en Berizzo y su porcentaje fotocopiad­or del modelo original de una idea que triunfó y fracasó sin solución de continuida­d sigue pareciendo un arma de doble filo.

¿Cuánto tiempo tendrá el entrenador argentino para calmar las aguas y restarles votos a los supuestos candidatos a Ibaigane? ¿Encontrará­n Urrutia y su secretaría técnica el fichaje de campanilla­s que ilusione definitiva­mente a los reticentes tras una campaña dura y de mucho desgaste social?

Los optimistas visualizan una llegada triunfal similar a la de Valverde, sin Europa de por medio y con un fútbol práctico y efectivo. Los realistas entendería­n un proceso de adaptación similar al que necesitó Bielsa.

Sin el caramelo de la Europa League algunos años después y con la anestesian­te rutina de la Liga, será complicado levantar de la grada selfie a la parroquia. ¡Menuda papeleta!

 ?? FOTO: JUAN ECHEVERRÍA ?? Expectativ­as renovadas Urrutia apostó por Berizzo para sustituir a Ziganda como entrenador del primer equipo tras una temporada que resultó decepciona­nte
FOTO: JUAN ECHEVERRÍA Expectativ­as renovadas Urrutia apostó por Berizzo para sustituir a Ziganda como entrenador del primer equipo tras una temporada que resultó decepciona­nte
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain