Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
PRIMERA CRISIS
El Madrid transmite en el Pizjuán los peores síntomas de la temporada con el derbi a la vuelta de la esquina En el equipo blanco no hubo ni rastro del sistema ni de la filosofía de juego implantados por Lopetegui
El Madrid saltó al césped del Ramón Sánchez Pizjuán dispuesto a asaltar el liderato tras la derrota del Barça en Leganés y 90 minutos después abandonó el escenario deshecho y con una de las peores derrotas de los últimos tiempos. Ya suma 6 en las últimas 7 visitas a Nervión. Desde el infausto día del ‘Alcorconazo’, en octubre de 2009, el equipo blanco no se iba al descanso con un 3-0 a cuestas.
“Hemos regalado 45 minutos”, confesó Casemiro tras el partido, “y no hemos hecho nada de lo que hemos trabajado durante la temporada”. La sinceridad del centrocampista brasileño reflejó a las claras la lamentable actuación del Madrid en un primer tiempo que puede marcar un punto de inflexión para Lopetegui.
El técnico vasco no tuvo respuesta para frenar la avalancha de juego de un Sevilla que desnudó punto por punto las debilidades del equipo blanco: la transición defensiva personalizada en la apatía de Marcelo, la lentitud en la circulación del balón o la alarmante ausencia de profundidad en ataque. Pablo Machín olió sangre y clavó el planteamiento. En el primer tiempo, su equipo sumó 11 disparos desde dentro del área, 7 remates entre los tres palos y su gran efectividad dejó al Madrid en la lona. El ‘liviano’ centro del campo sevillista formado por Banega, el Mudo Vázquez y Sarabia pasó por encima de la KMC a base no solo de buen juego sino de intensidad. Prueba de ello es que los tres jugadores locales acabaron amonestados con tarjeta amarilla.
Lopetegui movió ficha en el descanso en busca de una reacción que metiera a los suyos en el partido pero solo pudo cortar la hemorragia. Situó a Casemiro de central para cambiar el sistema pero al Madrid le faltó puntería y pólvora para amenazar la tranquilidad de su rival. En el Pizjuán solo dieron la talla Courtois, Bale y Modric, los únicos que intentaron rebelarse ante la mediocridad general blanca. En Nervión el Madrid no solo echó de menos a los ausentes Isco y Carvajal (dos bajas muy sensibles para el sistema de Lopetegui) sino que el grueso de los pesos pesados del equipo rayó muy por debajo del nivel que se le presupone.
Individualidades inexistentes
Ramos y Varane fueron una sombra de la pareja fiable de centrales que forman, Nacho no cumplió como acostumbra y Casemiro y Kroos se vieron desbordados en la medular. En ataque, Asensio y Benzema ni siquiera comparecieron. Lo único positivo fueron los minutos de Ceballos y la intensidad de Mariano. El Madrid de Lopetegui zozobra justo antes de un derbi que, a estas alturas de temporada, ya es trascendental
LAS CLAVES
1 FRAGILIDAD El Madrid fue una marioneta en manos de un gran Sevilla en la primera parte
2 NIVEL MUY BAJO El grueso del equipo cuajó una actuación fantasmagórica en el Sánchez Pizjuán