Grito de rabia

Williams acabó con su gafe liguero en San Mamés. ¡Y qué manera de ponerle fin! Con dos golazos de bandera que se tradujeron en tres puntos. Le hizo un roto a la defensa del Sevilla. La pantera vuelve a cazar en casa. Se quitó un peso de encima e incluso le entraron ganas de llorar, como reconoció él mismo. Iñaki está de vuelta