Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
Los sonidos del silencio
ñaki Williams se sumó ayer al grupo de jugadores rojiblancos que, al parecer, no tenía mayor problema para aceptar una posible rebaja de ficha dada la actual coyuntura económica, deportiva y social provocada por la pandemia del coronavirus. El silencio al respecto impera, de momento, en Ibaigane. A este nivel y a algunos otros. igo pensando, al igual que escribía hace unos días en esta misma columna que ahora es momento de hacer, no de decir. De puertas hacia dentro, claro está, pero con la vista puesta en todo lo que acontece fuera. Está lloviendo, mucho además; aunque, como decían esos mismos venerables ancianos a los que ahora algunos mamarrachos tan poco respetan, ‘siempre que llueve, escampa’. maginaba que en las tripas de Ibaigane algo se estaba cociendo. A fuego lento, parece. Este parón liguero, por mucha hucha que hayan dejado los anteriores gestores del club, supone un auténtico mazazo a nivel económico para el Athletic. La institución rojiblanca es única a nivel de filosofía, pero en lo que a la cuestión monetaria hace referencia vive la misma realidad que el resto. a pandemia sigue extendiéndose. De momento el único ejercicio que carece de sentido es la especulación en torno a la vuelta a la competición, la normalidad y otros asuntos. Lo primero y más importante es frenar su avance, ayudar cada uno desde su parcela y esperar. Luego ya llegará la hora de actuar. maginaba, insisto, que el Athletic algo estaba haciendo para colaborar con la causa. Osakidetza me dio ayer la razón. Egin, ez esan ●