Mundo Deportivo (Bizkaia-Araba)
El signo de los tiempos
a semana que viene, el 8 de agosto concretamente, se cumplirán dos años desde que el Chelsea hiciera oficial el fichaje de Kepa Arrizabalaga. Aquello se vio como un torpedo en la línea de flotación de la filosofía rojiblanca. Un genuino producto de la cantera de Lezama, al que más de uno no dudaba en comparar, por su proyección, con la cuasisagrada figura de José Ángel Iribar, prefería probar suerte en la Premier que hacer historia en el Athletic. a marcha del portero de Ondarroa dolía aún más porque llovía sobre mojado. Unos meses antes, Laporte había dejado Bilbao para unirse al Manchester City de Guardiola, que le venía tentando con insistencia. Más atrás en el tiempo quedaban las salidas, tras los fastos de la etapa de Bielsa, de piezas básicas como Ander Herrera, Javi Martínez o Fernando Llorente, hipnotizados por el oropel de equipos de postín en el concierto europeo. sta situación se reproduce ahora en el equipo femenino. Ayer, su director deportivo se lamentaba por no haber logrado retener a tres prometedoras jugadoras, como Damaris Egurrola, Maite Oroz y Amaiur Sarriegi. Es el signo de los tiempos. El fruto de la profesionalización de un fútbol, el femenino, que si bien está aún a años luz en cuanto a reconocimiento, va limando distancias con el masculino. Eso no es malo. Al contrario. Eso sí, al Athletic, que antes lograba más éxitos porque tenía mucha menos competencia, le toca adaptarse para sobrevivir con su filosofía. Exactamente lo mismo que viene haciendo el equipo masculino desde hace décadas ●