Ya llueve menos por Lezama

unque hizo ayer su aparición algún chubasco que se agradecía después de varios días de intenso calor, parece que por Lezama ya llueve menos, si bien en sentido metafórico. Para Gaizka Garitano tuvo que ser un alivio el ver que, si no todos, al menos cuatro de los seis contagiados por COVID19 ya han podido regresar al trabajo. Lógicamente, no integrados en el grupo, que lleva dos semanas de intensa preparación. Pero sí iniciando esa carga física tan necesaria para llegar en plenitud a la hora de la verdad. Y, además, entre los lesionados, Iñigo Martínez, Vesga y Nolaskoain ya dan muestras más que positivas en su evolución. Lo de Yuri y, sobre todo, lo de Ibai, va más despacio. ambién inspira optimismo el comprobar con qué nivel de ambición afronta el míster de Derio una campaña en la que, pese a no haberse clasificado para competición europea, al Athletic no le van a faltar frentes abiertos. La Liga, que es la que da de comer; la exótica Supercopa; la nueva edición de la Copa y, el más ilusionante de todos, esa final pendiente contra la Real que apunta a abril como fecha para su resolución. ara poder con ello, va a hacer falta todo y más. Y en esa onda parece estar Garitano, que no cierra la puerta a posibles refuerzos. No parece tarea sencilla, pero tras haberlo pintado tan difícil el director deportivo del club, Rafa Alkorta, lo dicho ahora por el entrenador arroja algo de esperanza sobre una posible llegada que aporte ilusión a la hinchada y más potencial al equipo. Hay que ser optimistas. Siempre que ha llovido ha escampado ●